La llamada Generación Y o más conocida como Millenials la forman jóvenes nacidos entre 1980 y 2000, en plena revolución tecnológica, que afrontan una crisis mundial sin precedentes, que desconfían de los bancos, que no pretende hipotecarse y que prefiere ganar menos a cambio de trabajar en empresas transparentes, que aporten prestigio, motivación y que […]
Dirigentes Digital
| 18 jun 2014
La llamada Generación Y o más conocida como Millenials la forman jóvenes nacidos entre 1980 y 2000, en plena revolución tecnológica, que afrontan una crisis mundial sin precedentes, que desconfían de los bancos, que no pretende hipotecarse y que prefiere ganar menos a cambio de trabajar en empresas transparentes, que aporten prestigio, motivación y que estén comprometidas socialmente.
Ese perfil, de más de 8 millones de personas en España, es con el que los headhunters nos enfrentamos a la hora de seleccionar a la nueva fuerza laboral, los futuros directivos.
Las características particulares de los Millenials generan un nuevo reto para los líderes de las empresas actuales. Éstos deben lograr una buena convivencia de esta generación con otras como la X y los baby boomers. Su ambición y su deseo de mantener un aprendizaje continuo y de ascender en la organización, requiere una rápida respuesta por parte de sus directivos y de unas políticas de Recursos Humanos enfocadas hacia la promoción interna, la confianza, la motivación y el compromiso mutuo. Según el feedback que dan las empresas que contratan estos perfiles, un aspecto destacable que se encuentran trabajando con este perfil de profesionales, es que necesitan un estímulo continuo potenciado por una constante retroalimentación que les haga sentir que su esfuerzo está siendo recompensado.
Esta generación se caracteriza por su alta formación académica y para ellos las empresas son el canal para realizarse profesionalmente e independizarse. Las empresas tienen con ellos, la oportunidad de sacar el máximo partido de valores imperantes como la creatividad, la flexibilidad o la innovación.
Sin embargo, los Millenials buscan una flexibilidad proporcionalmente relacionada con su ambición y por tanto las organizaciones están expuestas a altos índices de rotación de empleados que permanecen en la misma empresa entre 1 año y medio a 3 años. Es por ello que atraer y retener a un Millenial no es tarea fácil. En nuestras entrevistas ya vemos cómo los períodos de trabajo de estos profesionales en una misma empresa son una media de un 50% más cortos que el de personas con más trayectoria.
Estas características representan un reto organizacional. Son profesionales que presentan una tendencia a la frustración por su naturaleza impaciente y es por ello que debemos modificar los escenarios de reclutamiento y de las áreas de RRHH, para no dejar escapar los beneficios que comportan los Millenials. Junto con un buen sueldo, los Millennials consideran que deben tener garantizada la privacidad en su información y la libertad de expresarse en el ámbito laboral, sin cohibirse por la jerarquía organizacional. Para poder captar todo su talento, las empresas deben ofrecer mayor reconocimiento y crecimiento profesional, así como generar oportunidades de promoción y movilidad hacia otros países y puestos.
Teniendo esto último en cuenta y sabiendo que la mayor característica de este grupo es la facilidad que tienen para usar las nuevas tecnologías y su necesidad por mantenerse conectados a través de las redes sociales, las empresas deben también replantearse la velocidad laboral. Si los Millenials europeos afirman que la tecnología les ha ayudado a encontrar trabajo, a relacionarse y a formarse, los líderes deben establecer nuevas herramientas y plataformas que permitan la expresión de las ideas de estos profesionales a través de medios como las redes sociales corporativas, a la vez que deben generar espacios de diálogo ágiles y motivar de manera continua con nuevos retos y nuevos incentivos. El headhunting y la formación también pasan a tener un amigo en el espacio online.
Por último, y relacionado con lo anterior, la comunicación es un pilar básico para el éxito de estos profesionales en las empresas y para garantizar su fidelidad y continuidad en el proyecto que hayan iniciado. La transparencia y la sinceridad en todos los procesos empresariales son primordiales para sacar el máximo partido de la productividad de nuestros grandes aliados los Millenials y, con ellos, de nuestras organizaciones.
Consuelo Castilla
Presidenta del Grupo MC Asociados