Norges Bank ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que controla un 2,649% (2,645% y un 0,004% adicional vía instrumentos financieros) del capital de Técnicas Reunidas, frente al 3,433% registrado ante el regulador previamente. A mediados de diciembre, FMR desembarcaba en el accionariado de la compañía con un 3,061% del capital. […]
Dirigentes Digital
| 08 feb 2017
Norges Bank ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que controla un 2,649% (2,645% y un 0,004% adicional vía instrumentos financieros) del capital de Técnicas Reunidas, frente al 3,433% registrado ante el regulador previamente. A mediados de diciembre, FMR desembarcaba en el accionariado de la compañía con un 3,061% del capital. Técnicas Reunidas alcanzó en 2016 con contratos por valor de 10.500 millones de euros, tras el contrato de Ras Tanura para Saudi Aramco, que supone menos del 14% de dicha cartera. Dicho acuerdo tendrá una duración de 48 meses hasta la terminación mecánica de la planta, e incluye la ingeniería, aprovisionamiento, construcción y asistencia a la puesta en marcha del proyecto, el cual está dividido en dos paquetes. Primero, la Unidad de Isomerización, Unidad de Hidrotratamiento de Nafta, Unidad CCR, Interconexiones, Sistema de Antorcha y Edificios asociados. Y, segundo, instalaciones y servicios auxiliares. Técnicas Reunidas cerró los nueve primeros meses del año con un beneficio neto de 101 millones de euros, lo que supone un descenso del 12% con respecto al mismo periodo de 2015. Por su parte, los ingresos ordinarios repuntaron un 14%, hasta los 3.438 millones de euros; mientras que su cartera ascendió hasta los 10.090 millones, un 1% más. El grupo espera alcanzar un crecimiento de ventas hasta los 4.500-4-600 millones, un margen Ebit en torno al 4% y reitera su “compromiso de continuidad en la distribución de dividendos”. El consejero delegado (CEO por sus siglas en inglés) de Técnicas Reunidas, Juan Lladó, destaca que la compañía está “ejecutando diversos proyectos relacionados con la producción de combustibles limpios y con el procesamiento de gas natural. Este tipo de proyectos ayudan a que nuestros clientes se adapten a las nuevas regulaciones medioambientales, generen una energía más limpia y hagan crecer su industria petroquímica. Todos ellos, serán factores claves que impulsen la inversión a futuro. Por estas razones confiamos en las buenas perspectivas que ofrece el negocio para 2017 y en adelante”.