Los mercados de valores europeos mantuvieron ayer el buen tono, cerrando nuevamente al alza en una sesión en la que los inversores obviaron tanto los "malos" datos de pedidos de fábrica alemanes, correspondientes al mes de agosto, que se vieron negativamente afectados por la debilidad de la demanda de los países emergentes, como la nueva […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2015
Los mercados de valores europeos mantuvieron ayer el buen tono, cerrando nuevamente al alza en una sesión en la que los inversores obviaron tanto los "malos" datos de pedidos de fábrica alemanes, correspondientes al mes de agosto, que se vieron negativamente afectados por la debilidad de la demanda de los países emergentes, como la nueva revisión a la baja que del crecimiento económico mundial en 2015 dio a conocer el FMI. Los sectores energéticos y los relacionados con el automóvil fueron los que mejor se comportaron durante la jornada, beneficiados los primeros por el rebote que experimentó el precio del petróleo, rebote que fue consecuencia de tres factores: i) la debilidad del dólar; ii) la filtración de conversaciones entre productores de la OPEP y productores no pertenecientes al cártel para coordinarse e impulsar los precios del petróleo; y iii) la caída de la producción estadounidense de crudo en septiembre (descendió en 120.000 barriles al día), lo que situó la misma a su nivel más bajo desde septiembre de 2014. Por el contrario, los sectores de corte más defensivo como los de alimentación o los de las utilidades (servicios públicos) fueron los que peor comportamiento tuvieron durante la jornada. A estos hay que sumar el de la sanidad, cuyos valores, especialmente los biotecnológicos, volvieron a ser castigados duramente como consecuencia de la polémica suscitada por la forma en que establecen los precios de sus productos.
De esta forma, estas Bolsas fueron capaces de sobreponerse a cierta toma de beneficios inicial, cerrando sus principales índices con revalorizaciones cercanas al 1%. No ocurrió lo mismo en Wall Street, donde los índices, a pesar del buen comportamiento del sector energético, cerraron de forma mixta, con el Nasdaq Composite cediendo posiciones, lastrado por el sector biotecnológico. El S&P 500 también cerró a la baja, rompiendo así la racha de cinco sesiones consecutivas de avances, la mejor racha de todo 2015.
Si ayer las bolsas europeas en general fueron capaces de superar cualquier intento de realizaciones de beneficios, obviando los inversores "las malas" noticias que se conocieron sobre el crecimiento económico mundial, hoy creemos que los inversores se decantarán por las ventas, aprovechando las fuertes alzas de los últimos días para realizar beneficios. La falta de referencias macro de calado (lo más relevante es la publicación en Alemania de la producción industrial en el mes de agosto) y los niveles alcanzados por los índices tras el reciente rally, creemos que harán que los inversores se decanten por la prudencia, manteniéndose muchos de ellos al margen de la renta variable a la espera de que mañana se inicie de forma oficiosa la temporada de presentación de resultados trimestrales en Wall Street con la publicación de los de la multinacional fabricante de aluminio Alcoa. No obstante, el buen comportamiento del precio del crudo esta madrugada en los mercados asiáticos y la debilidad del dólar favorecerá, un día más, el comportamiento en bolsa de los valores relacionados con las materias primas, especialmente los energéticos, lo que debe servir como soporte de los índices.
Por último, señalar que, tal y como se esperaba, el Banco de Japón (BoJ) ha mantenido sus tipos de interés oficiales sin cambios así como el volumen destinado a la compra de activos en los mercados secundarios. El BoJ se ha mostrado relativamente conforme con el ritmo moderado de crecimiento de la economía del país, a pesar de identificar debilidades en la producción industrial y en las exportaciones como consecuencia de la crisis de los países emergentes. La Bolsa japonesa ha reaccionado relativamente bien a este anuncio, cerrando la sesión al alza por sexto día de forma consecutiva.
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