Aunque para muchos ingenieros ser contratados por Google puede ser el sueño con el que fantasean toda su vida, también existen quienes deciden abandonar la empresa una vez que están dentro de ella. Es conocido por todos el baile o robo de ‘cerebros’ que se produce constantemente entre compañías del más alto nivel. Desde hace […]
Dirigentes Digital
| 20 ene 2015
Aunque para muchos ingenieros ser contratados por Google puede ser el sueño con el que fantasean toda su vida, también existen quienes deciden abandonar la empresa una vez que están dentro de ella. Es conocido por todos el baile o robo de ‘cerebros’ que se produce constantemente entre compañías del más alto nivel. Desde hace unos meses las que lideran el Nasdaq no son las únicas que se aprovechan de estos cambios.
Han surgido nuevas startups que están cosechando muchos éxitos, y que pescan talento entre las aguas revueltas de empresas más grandes. Algunas de estas son Instagram, Airbnb o Uber, que ya ha alcanzado un valor de 40.000 millones de dólares. Sin duda un reclamo para programadores e ingenieros ‘estrella’ que ven en estas pequeñas empresas la oportunidad perfecta para desarrollar todo su potencial y talento, sin las restricciones que supone trabajar para un gigante.
Además, en Silicon Valley es habitual que parte -cuando no la mitad- del sueldo de un trabajador se pague en acciones de la empresa. Por esto, cuando las previsiones para una compañía no son muy buenas, sus trabajadores buscan alternativas, que suelen encontrar muy fácilmente, sobre todo cuando se trata de profesionales reputados y codiciados en el sector.
Facebook, la gran alternativa
Y cuando las opciones pasan por dejar una importante tecnológica para llegar a otra, la cosa se complica.
Apple y Google tienen acuerdos de no agresión para evitar sangrías de talento, pero hay mucho dinero en juego y otras empresas están buscando su hueco en la partida. Una de las especialmente temidas en la guerra de talentos por Apple y Google es Facebook. La empresa creada por Mark Zuckerberg fichó en abril de 2014 al programador de reconocimiento de voz de Google Mike Lebeau. Ahora, la red social ha dado otro golpe sobre la mesa.
La compañía Facebook busca sumar cerca de 1.200 nuevos empleados, una consecuencia de agresivas inversiones que, según han dicho los ejecutivos, marcarán este.
Oculus Rift, el fabricante de cascos de realidad virtual que Facebook adquirió está entre las áreas clave programadas para crecer, con 54 empleos publicados en su sitio web.
Entre los roles que Facebook necesita cubrir para el negocio de Oculus hay ejecutivos para supervisar logística, adquisiciones y el planeamiento de la cadena de suministro global, lo que según algunos analistas es una señal de que el producto está acercándose a su lanzamiento comercial.
El ambicioso esfuerzo de la compañía de Zuckerberg para construir sus propios satélites y drones capaces de entregar servicios de Internet en regiones remotas del mundo es otra área importante para las contrataciones: el programa tiene a Facebook buscando especialistas en áreas como aviónica, comunicaciones de radiofrecuencia y termoingeniería.