En 2014, la inversión mundial en fintech se multiplicó por tres, hasta alcanzar los 12.000 millones de dólares. Y, ese mismo año, la banca invirtió 215.000 millones de dólares en tecnologías de la información (software, hardware, y en servicios internos y externos). Según este estudio, los servicios bancarios y los pagos serán los más expuestos […]
Dirigentes Digital
| 16 jun 2016
En 2014, la inversión mundial en fintech se multiplicó por tres, hasta alcanzar los 12.000 millones de dólares. Y, ese mismo año, la banca invirtió 215.000 millones de dólares en tecnologías de la información (software, hardware, y en servicios internos y externos).
Según este estudio, los servicios bancarios y los pagos serán los más expuestos en un futuro próximo. En los préstamos de consumo y comercial, por ejemplo, la aparición de las plataformas en línea permite a los individuos y las empresas prestarse dinero entre sí. La innovación también se manifiesta en los modelos alternativos de crédito, en el uso de los datos no tradicional, en los rápidos procesos de préstamos y en menores costes de operación.
En los últimos años, la industria de pagos también ha experimentado un alto nivel de interrupción con la oleada de nuevas tecnologías que impulsan estos procesos de pagos, las nuevas aplicaciones que facilitan estos servicios, redes alternativas de transformación y el aumento del uso de dispositivos electrónicos para transferir dinero entre cuentas.
La desintermediación es otra de las poderosas armas del Fintech. A medida que los clientes se están acostumbrando a la experiencia digital ofrecida por empresas como Google, Amazon, Facebook y Apple, esperan el mismo nivel de experiencia del cliente de sus proveedores de servicios financieros.
Los millennials demandan pagos seguros y rápidos, con los teléfonos inteligentes como uno de los máximos impulsores del cambio de patrones de pago. Los consumidores móviles de hoy esperan inmediatez, comodidad y seguridad en los pagos. El análisis estima que en 2020 podría haber en el mundo 25.000 millones de dispositivos conectados por lo que las entidades se están centrando en la ciberseguridad y el Internet de las cosas.
La inteligencia artificial también preocupa al sector, ya que supondrá una revolución parecida a la que ocasionó el nacimiento de los cajeros automáticos. Ya hay entidades que ofrecen servicios basadas en esta tecnología, como activos gestionados por robots.
Blockchain, el valor sin explotar
Para PriceWaterhouseCoopers, el blokchain está aún sin explotar. Esta tecnología basada en un libro de contabilidad digital y segura ayuda a la optimización de procesos. Sin embargo, aunque la tecnología muestra una gran cantidad de aplicaciones, presenta varios retos y barreras para su permanente adopción. La mayoría de los encuestados reconocen su importancia.
Lo cierto es que la tecnología blockchain puede dar lugar a un futuro competitivo radicalmente diferente en el sector financiero. La principal ventaja que hace que esta tecnología atraiga a las entidades es la posibilidad de reducir el coste de las infraestructuras y plataformas internas de los bancos.