Entre lunes y martes de la próxima semana España podría tener de nuevo un candidato a ser el próximo presidente del Gobierno. Al menos es lo que desea el Rey Felipe VI, que ha convocado a los líderes de los partidos políticos para estos días. Tras los encuentros, el monarca designará un candidato a someterse […]
Dirigentes Digital
| 11 oct 2016
Entre lunes y martes de la próxima semana España podría tener de nuevo un candidato a ser el próximo presidente del Gobierno. Al menos es lo que desea el Rey Felipe VI, que ha convocado a los líderes de los partidos políticos para estos días. Tras los encuentros, el monarca designará un candidato a someterse a una sesión de investidura, casi en el límite del plazo para formar un gobierno que evite unas terceras elecciones en un año. La presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha confirmado por su parte que aún no hay fecha para la celebración de un debate de investidura que tiene que producirse antes del 31 de octubre. Pastor, anunciará la fecha una vez todos los candidatos hayan hablado con el Rey. La pregunta obligada es sí hay suficientes días como para investir a Rajoy. Las cuentas solo salen para los más optimistas ya que entre el día 25 y el 31 sólo hay 5 días, y dos de ellos son fin de semana, por lo que sólo quedarían tres días para celebrar el debate en el Congreso. Lo excepcional de la situación podría forzar a que el debate de investidura se celebrara el último sábado del mes, el día 29. Otro obstáculo para que se forme un Gobierno antes de la disolución de las cortes es la celebración del Comité Federal del Partido Socialista, donde los miembros del partido deberán decidir si ponen en bandeja el mandato a la oposición. Si pretende evitar por todos los medios unas terceras elecciones, el Comité deberá realizarse el penúltimo domingo del mes (23 de octubre) como muy tarde. Por tanto, el debate de investidura debería celebrarse entre los días 26 y 28 de este mes, un margen muy corto teniendo en cuenta, que según el artículo 69 del reglamento de la Cámara Baja, los debates deben convocarse con al menos 48 horas, “salvo acuerdo en contrario de la Mesa, debidamente justificado”. Además, la investidura debe convocarse teniendo presente que de necesitarse una segunda vuelta debe realizarse también a las 48 horas de la primera. En caso de que el PSOE decidiera abstenerse, habría que ver si lo hace en la primera ocasión o si espera a la segunda.