Rato defiende que las tarjetas eran parte de su retribución

El juicio por las tarjetas black se reanuda hoy con la declaración de Rodrigo Rato en la Audiencia Nacional. El ex vicepresidente del Gobienro deberá aclarar durante su interrogatorio el régimen fiscal de estas tarjetas tras las últimas declaraciones de Miguel Blesa el pasado día 30.

Durante su intervención, Rodrigo Rato ha asegurado que "no tenía motivos" para dudar de que dichas tarjetas no fuesen parte de su retribución. Preguntado sobre si le habían dicho que no tendría que declarar nada relacionado con las tarjetas, Rato ha declarado que no lo recuerda y que le aseguraron que eran para "gastos personales".

Por su parte, Ildefonso Sánchez Barcoj, ex director general de Caja Madrid, ha atribuido toda la responsabilidad de las tarjetas a Blesa durante su intervención, y ha asegurado que la primera tarjeta se la dio Blesa en 1999. Al preguntarle sobre el límite de su tarjeta, Sánchez Barcoj ha asegurado que gastaba todo el límite impuesto por Blesa ya que era parte de su salario, y que dicho límite correspondía aproximadamente al 2% de su salario, que no ha querido concretar.

El turno de Blesa

Miguel Blesa sólo contestó a las preguntas delTribunal, al fiscal y a su defensa, rechazando las cuestiones de Bankia y el Frob. El fiscal Alejandro Luzón abrió la ronda incidiendo en el funcionamiento del sistema retributivo. El ex dirigente basó sus respuestas en el desconocimiento y en la herencia heredada de la antigua directiva.

"He conocido más detalles del funcionamiento de las tarjetas en este proceso que cuando me la dieron", declaró haciendo referencia cuando entró como consejero en la entidad, recalcando que el sistema se heredó de la época de Jaime Terceiro. Blesa incidió que no realizó preguntas sobre la tarjeta porque dio por hecho de que se trataba como un complemento a su salario y  "por confianza en la entidad".

El que fuera uno de los más importantes banqueros del país indicó que hasta que Bankia no puso en conocimiento las tarjetas black: "Banco de España y Hacienda no pusieron nunca tacha a la retribución de los consejeros".

El fiscal preguntó si sabía que no se realizaba retenciones fiscales en las disposiciones de las tarjetas. "Pensábamos que había retención lo supimos en este proceso, confiábamos en el responsable fiscal de la entidad, contestó. "Nadie ignoraba que esto era una retribución", afirmó cuando el fiscal le ha insistido "por qué no fue advertido el responsable fiscal".

Blesa insistió que el sistema de las tarjetas black era transparente y no había opacidad, a pesar de que no se declaraba al fisco. Luzón puso de relieve que en la cuentas de la entidad los gastos ocasionados por las tarjetas no aparecían reflejados en los gastos de personal. Blesa defendió  que no toda la retribución de los consejeros se refleja en ese apartado, como es el caso de los fondos de pensiones.

El ministerio fiscal también abordó si dependía él aumento de límites de gasto. "Las actualizaciones las decido yo y las comunico para que se tome nota para el control de ese gasto", admitió Blesa aunque lo ha justificado por el crecimiento de la entidad.

Rechazo a las hojas excel

En el turno de las preguntas de su abogado, Blesa rechazó la validez de la hoja de Excel que recogía los gastos de la ex cúpula de Caja Madrid con las tarjetas black que ha presentado Bankia como prueba. "He examinado parcialmente el Excel, lleno de inexactitudes, uno no tiene el don de la ubicuidad, es una elaboración que hace Bankia no sé con qué datos. Si uno compara el extracto que facilita una entidad y lo compara con el listado Excel verá que no coincide en absoluto. No es un movimiento de cuenta, no es documento bancario, no es una suma de extractos bancarios", afirmó. "No voy a reconocerlo porque no puedo contrastar los datos con ningún documento", remarcó, a preguntas de su letrado.