Ya ha pasado más de un mes desde que el presidente de EEUU, Donald Trump, adelantará que “se acerca un importante anuncio en materia de impuestos” y dos semanas ya desde su promesa de una “reforma fiscal” histórica. Este jueves, de ‘resaca’ de las elecciones de Holanda y de la subida de tipos de la […]
Dirigentes Digital
| 16 mar 2017
Ya ha pasado más de un mes desde que el presidente de EEUU, Donald Trump, adelantará que “se acerca un importante anuncio en materia de impuestos” y dos semanas ya desde su promesa de una “reforma fiscal” histórica. Este jueves, de ‘resaca’ de las elecciones de Holanda y de la subida de tipos de la Reserva Federal (Fed), cumple el techo de gasto y el republicano presenta el borrador de sus Presupuestos, que podrían arrojar luz sobre un mercado que sólo con las expectativas ya ha ‘brillado’ con fuerza… Recordemos que entre las propuestas conocidas de su plan económico destacan la rebaja del tipo marginal máximo del impuesto de sociedades al 20% y reducir a tres tramos el de las personas físicas (siendo el más alto del 33%). Asimismo, tal y como destaca Renta 4, sobre la mesa tenemos la idea de “recortar el gasto del Departamento de Estado y la Agencia para el Desarrollo Internacional en un 37%, con el fin de aumentar el gasto en seguridad nacional, con un incremento previsto en los gastos del Pentágono del 10% (54.000 millones de dólares). Se pretende también reducir el presupuesto de la Agencia de Protección Ambiental en un 25%, y recortar su personal en un 19%; así como el gasto del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano en casi un 14% (6.000 millones). Por último, podría también incluir un recorte al Departamento de Comercio en un 18%”. Por otro lado, Trump prevé pedir al Congreso que se apruebe una ley para invertir “un billón de dólares en infraestructuras en EEUU que se financiarán con capital público y privado y crearán millones de empleos”, según sus propias palabras. Empresas que ganas con la reducción de impuestos Philip Ferreira, director del equipo de análisis Cross Asset Research de Lyxor, apunta: “La reforma fiscal a las empresas prevista por la nueva Administración estadounidense ha sido considerada como una oportunidad tanto para la tecnología, como para las farmacéuticas (…) podría potencialmente ampliar la actividad de fusiones y adquisiciones (M&A por sus siglas en inglés). Los gestores ‘event driven’ parecen a la vanguardia para beneficiarse de esto”. Mientras, Christina Padgett, vicepresidenta senior de Moody’s, detalla que los beneficios de “unos menores impuestos, la deducción de la inversión total y la exención a los beneficios de las exportadoras y a las ventas al exterior son generalmente mayores para las empresas con ‘grado de inversión’, que para aquellas cuya deuda es calificada de ‘especulativa’”. Y es que, explica, las primeras tienden a ser más grande en tamaño y globales, lo que se traduce en que su factura fiscal es mucho mayor. Menor fiscalidad y más gasto: ¿qué pasa con el techo de deuda? En este contexto, la agencia de calificación crediticia Fitch recuerda que el techo de deuda de EEUU “está programado para volver a situarse por debajo de los 20 billones de dólares este jueves, tras haber sido suspendido desde noviembre de 2015”, con esto, el Tesoro no puede aumentar su stock de pasivo, aunque sí depender de las “medidas extraordinarias”. La Oficina de Presupuesto del Congreso estima que el Ejecutivo podrá financiarse “hasta algún momento de este otoño” si no se logra avanzar en una nueva paralización o ampliación del mismo. La llegada de esta “fecha x”, tal y como la denomina Fitch, sería un “catalizador negativo para el rating de EEUU, ante el riesgo que supone de perder el servicio de pago de la deuda, el posible efecto sobre la confianza de los inversores en el mayor mercado del mundo de bonos y el daño a nuestra visión sobre la gobernanza fiscal del país”. Sin embargo, y aunque reconoce que los republicanos son fuertes opositores a un techo de deuda más alto, parece poco probable que se este supuesto se alcance, pues “el Congreso será capaz de votar oportunamente para suspenderlo o elevarlo”.