Este jueves, la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) de Reino Unido ha dado a conocer que, en el último trimestre de 2017, el PIB británico ha crecido un 0,4% respecto a los trimestres anteriores. Este dato es una décima inferior a las estimaciones preliminares y ha quedado por debajo de las expectativas del mercado. Este […]
Dirigentes Digital
| 22 feb 2018
Este jueves, la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) de Reino Unido ha dado a conocer que, en el último trimestre de 2017, el PIB británico ha crecido un 0,4% respecto a los trimestres anteriores. Este dato es una décima inferior a las estimaciones preliminares y ha quedado por debajo de las expectativas del mercado. Este mismo guión se repite comparando la cifra de crecimiento con el mismo trimestre del año anterior, con un avance del PIB del 1,4% que resta una décima a la previsión de la agencia estadística y supone el ritmo más lento de crecimiento económico de los últimos cinco años. Además, tomando como referencia las cifras del conjunto del año pasado, el avance del PIB de Reino Unido alcanzó el 1,7%, de nuevo una décima por debajo de las estimaciones previas, dos décimas menos que el registrado en 2016 y su cota más baja desde 2012, cuando su economía combatía la recesión global. El portavoz del instituto estadístico británico, Darren Morgan, ha asegurado que esta ralentización del ritmo de crecimiento del país entre octubre y diciembre va aparejada al retroceso en “minería, generación de energía y servicios, que fueron suficientes para motivar una ligera revisión a la baja del crecimiento trimestral en general”. Dentro de los componentes que más han restado al PIB británico entre octubre y diciembre de 2017 están las exportaciones netas, que recortaron medio punto de crecimiento. Mientras, la inversión empresarial ha conseguido mantenerse respecto al trimestre anterior, aunque acumuló un crecimiento del 2,1% interanual. Con las negociaciones sobre el Brexit entre el gobierno de Theresa May y la Comisión Europea todavía en marcha y sin visos de acuerdo, la economía de Reino Unido comienza a dar señales preocupantes y parece dar la razón al memorándum del ejecutivo británico que fue filtrado a principios de mes y auguraba un retroceso del PIB del 8% en caso de que no haya acuerdo comercial entre ambas partes. Por otra parte, el ONS también ha dado a conocer las cifras de desempleo, que han marcado su primera subida en dos años, hasta el 4,4%, respecto al tercer trimestre de 2017. Así, el número de parados británicos ha alcanzado los 1,47 millones, lo que supone 123.000 menos que hace un año, pero 46.000 más que el trimestre anterior.
Además, el repunte de la inflación ha motivado que los medios semanales de los trabajadores creciesen un 2,5% en términos nominales, pero se contrayesen un 0,3% en datos reales, que tienen en cuenta las fluctuaciones de los precios.
A pesar de la inflación, el gasto de los hogares aumentó un 1,4% en el cuarto trimestre respecto al mismo periodo del año anterior, mostrando además un leve repunte de una décima respecto al periodo inmediatamente anterior.