Repsol quiere eliminar de un plumazo la incertidumbre que genera el precio del petróleo para el negocio en los próximos años. Para ello, acaba de presentar un plan estratégico entre 2016 y 2020 con la referencia del barril a 50 dólares. "No quiero dedicar mucho tiempo al futuro del precio del petróleo, tenemos que vivir con naturalidad la volatilidad del mercado", ha destacado Imaz, en la presentación de la hoja de ruta de la compañía. El directivo cree que el oro negro tendrá una tendencia al alza en los próximos años, para situarse el barril sobre los 90 dólares en 2019; pero la compañía ha preferido ser conservadora en la elaboración del plan de negocio, estableciendo 50 dólares el barril para su aplicación.
El objetivo del plan es crear valor, incluso en entornos de precios bajos, ha subrayado Imaz. Las nuevas guías de negocio después de adquirir Talisman será mostrar "fortaleza y resistencia, y poner en valor nuestros activos". "Repsol será una compañía más fuerte, ágil y competitiva tras finalizar en 2020", ha indicado. La compañía contempla multiplicar por dos su Ebitda hasta los 11.500 millones, gracias a la integración de Talisman y al crecimiento experimentado estos últimos años en exploración.
Para alcanzar este objetivo, la petrolera se centrará en poner en valor sus activos, ganar eficiencia y obtener
rentabilidad de su portfolio. "La primera palanca del plan será la eficiencia", ha indicado Imaz, "que permitirá un ahorro de caja de 2.100 millones anuales gracias a la integración de Talisman". De ellos, 1.500 millones corresponden a gastos operativos y 600 millones por ahorro en inversiones.
La reducción del capex respecto a 2014 se reducirá en 2.600 millones, que supone un 40% menos. "Apostaremos por proyectos de más valor", ha dicho el número dos de la petrolera, al tiempo que ha anunciado desinversiones por 6.500 millones, pero ha destacado que las inversiones superarán en el período por encima de los 23.000 millones, "Repsol no dejará de invertir". La compañía contempla un aumento de producción de entre 700.000 y 750.000 barriles diarios, frente a los 650.000 actuales.
El cambio de estrategia de la compañía ha quedado descrita por el consejero delegado en el sentido que "cuando el barril de 100 dólares la prioridad es aumentar la productividad, cuando baja la situación cambia en la búsqueda de optimización de costes y de rentabilidad del barril". Y ha añadido que "Talisman ha permitido alcanzar los objetivos de producción con una cartera de activos diversificada. Hemos comprado reservas, futuro, a diez dólares barril que nos permite comenzar un nuevo ciclo con fortaleza".
Otro de los cambios importantes en el plan, será la focalización del área de Exploración y Producción en tres regiones estratégicas: Norteamérica, Latinoamérica y Sudeste Asiático, con un alto potencial de desarrollo orgánico y descartando regiones con un riesgo económico elevado.
Imaz se ha comprometido a mantener el dividendo en un euro por acción bajo la fórmula de scrip dividend, con la perspectiva de mejora si la evolución del crudo es favorable para la compañía, "aunque la prioridad seguirá siendo reducir deuda".
Sobre la participación del 30% de la petrolera en Gas Natural, de la que se ha especulado en las semanas previas a la presentación sobre su venta; el consejero delegado ha subrayado que en los 6.200 millones de desinversiones no está contemplada esta posibilidad. "Estamos cómodos porque nos da un retorno financiero importante y desde el punto de vista estratégico del gas es una opción interesante".
