La decisión de Reino Unido de salir de la Unión Europea (UE) "ha debilitado las perspectivas de la economía" de la región, advierten desde Capital Economics. Reconocen que, en última instancia, a los británicos "les irá bien fuera", pero, a corto, la demanda se verá perjudicada, impactando esto en las exportaciones de otros países; mientras tanto, […]
Dirigentes Digital
| 18 jul 2016
La decisión de Reino Unido de salir de la Unión Europea (UE) "ha debilitado las perspectivas de la economía" de la región, advierten desde Capital Economics. Reconocen que, en última instancia, a los británicos "les irá bien fuera", pero, a corto, la demanda se verá perjudicada, impactando esto en las exportaciones de otros países; mientras tanto, el aumento "del euroescepticismo incrementa la incertidumbre política".
Rebajan sus previsiones de crecimiento para la mayor parte de los países de la Zona Euro y, en concreto, estos analistas apuntan que "Alemania podría sentir directamente los efectos de una demanda más débil en Reino Unido más que la mayoría". Al mismo tiempo, en Francia, "la inestabilidad política ante las elecciones del próximo año y en espera de más austeridad pesarán sobre el crecimiento".
Mientras tanto, ha quedado bien claro que "las preocupaciones sobre el sector financiero de Italia van a ir en aumento" y el nuevo Gobierno de España "tendrá dificultades para cumplir los objetivos fiscales pactados con Bruselas ya que la recuperación se desacelerará", también la mejora de Holanda "esta destinada a reducirse debido a sus fuertes vínculos comerciales con Reino Unido".
El potencial de Portugal, por su parte, "está limitado por la necesidad de nuevos ajustes. Y con escasas perspectivas de ver aliviada su carga de deuda, el futuro de Grecia dentro de la Zona Euro está lejos de ser seguro".
Prevén estos expertos que el BCE responderá a todos estos acontecimientos con más medidas de estímulo, probablemente incrementando su programa de compra de activos (QE) de nuevo y rebajando los tipos. Sin embargo, alertan, "es poco probable que esto evite que la economía de la Zona Euro decepcione".
Tras crecer cerca de un 1,2% este año, la firma cree que pasará a registrar una mejora del PIB del 1% en 2017, frente a su anterior estimación del 1,5%. Y no descartan un mayor debilitamiento si el Brexit ‘da alas’ al sentimiento anti-UE en toda la región y se vuelven a encender las alarmas sobre el futuro de la unión monetaria.
En el plano corporativo, por otro lado, desde Allianz Global Investors recuerdan que antes de la consulta británica "las perspectivas de beneficios para las empresas europeas habían ido mejorando en relación con las revisiones de beneficios (…) Hacia finales de mes, cuando las corporaciones del Viejo Continente comiencen a publicar sus cuentas, tendremos más claridad sobre la rentabilidad y perspectivas tras la consulta".
Finalmente, Peter Garnry, jefe de estrategia de renta variable de Saxo Bank, cree que ante el resultado del referéndum, y durante el tercer trimestre, las Bolsas perdedoras probablemente sean las de la periferia europea. Por sectores, añade, financiero, consumo e industrial tendrán peores rendimientos "y las empresas con más apalancamiento en cada uno de estos tres sectores experimentarán un escenario de presión crediticia. Los bancos europeos seguirán sufriendo ante la falta de confianza y la renovada presión sobre los márgenes de intereses netos como consecuencia de las tasas negativas".
Sobre el equity británico, lo tiene claro, "los inversores deberían infraponderar las acciones domésticas del Reino Unido (Ftse 250), ya que el mercado tendrá que recotizar este segmento considerando condiciones económicas más débiles. La gran incertidumbre sobre el futuro de los bancos y aseguradoras domiciliadas en el país, por las posibles condiciones difíciles para que Londres mantenga sus derechos de pasaporte, también implicarán menores valoraciones para las finanzas".