La pelea por los cerca de 1.200 millones de euros en sobrecostes ya ha comenzado. Tanto la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) como Sacyr se preparan para la celebración de la primera reunión con la Junta de Arbitraje de Disputas (Dispute Adjudication Board-DAB), el organismo de arbitraje, para decidir si la compañía española deberá recibir la totalidad o una parte de la millonaria cantidad que reclama.
De momento las obras -paralizadas en enero de este año ante la reclamación de Sacyr- han seguido finalmente su marcha después de que se lograra el principio de acuerdo entre ambas partes a finales del pasado febrero. Ahora mismo, ya se ha acometido el alrededor del 80% de la ejecución final.
Los retrasos continúan
Pese al avance de las obras, el retraso será inevitable. La fecha de finalización del proyecto estaba inicialmente prevista para finales del verano de 2014. Eso será imposible, con los retrasos acumulados, pero cabe la posibilidad que tampoco se consiga un año más tarde -lo que sin duda, además, aumentará los costes-.
En el acuerdo "conceptual" entre ambas partes, que finalmente se rompió, ya se estableció diciembre de 2015 como fecha de finalización. Meses después, este es el deadline más optimista.
Más resoluciones
No obstante, en septiembre se volverá a celebrar una nueva reunión que determine si la ACP debe abonar cerca de 500 millones de dólares por ser responsable de ofrecer datos incorrectos sobre los minerales de la zona que impedían la fabricación del hormigón.
Una reclamación que, interpuesta por Sacyr en 2011, fue rechazada por la ACP a comienzo de 2013, pero que ahora, tres años después, juzgará el organismo de arbitraje.