Todavía digiriendo el mercado la
macro ampliación de Santander realizada la semana pasada, los inversores han desayunado con la noticia de que el multimillonario George Soros ha acudido a la ampliación con una inversión de 500 millones, que supondría el 7% de los fondos recaudados por la entidad, según ha publicado esta mañana la prensa nacional.
DIRIGENTES se ha puesto en contacto con los bancos colocadores, UBS y Goldman Sachs, y ni afirman ni desmienten la información, pero afirman que sí se ha producido peticiones importantes que se aproximan a la cifra de la inversión de George Soros. Desde Santander explican que no están autorizados a informar sobre este tipo de inversiones privadas, pero sí han señalado que la mayor parte de la demanda proviene de grandes fondos de inversión de Estados Unidos y Reino Unido.
Las nuevas acciones de Santander comenzarán a cotizar a partir del próximo martes. En ese momento, los accionistas que hayan superado el 3% del capital social de la entidad están obligados a comunicarlo a la CNMV y también los cambios significativos de los accionistas de referencia. La entrada de Soros por 500 millones no será lo suficientemente alta para que se vea obligado a hacerlo público. Soros pasaría a tener aproximadamente un 0,53% del capital de la entidad al adquirir casi 81 millones de acciones nuevas.
De confirmarse, el fondo pasaría a ser uno de los accionistas significativos del banco. Hoy por hoy, el fondo de inversión BlackRock es el primer
accionista del banco con un 4,77%. El fondo de Soros pasará a formar parte de una larga lista de entidades que confían en la evolución positiva de Santander, como Barclays, Generali, JP Morgan o BNP. La familia Botín controla con mano de hierro el banco con apenas con una participación testimonial, apenas 1,4%.
Sin embargo, no es la primera vez que el magnate aprovecha este tipo de operaciones para entrar en grandes
empresas españolas. Los fondos controlados por Soros entraron en la OPV de Endesa con 200 millones de dólares y haciéndose con el 1,5% del capital de la eléctrica. A comienzos del año pasado adquirió un 3% de FCC, aunque
finalmente desestimó acudir a la ampliación de la constructora para convertirse en máximo accionista. Además, Soros cubrió más del 18% de la colocación del fondo inmobiliario Hispania Activos Inmobiliarios constituido por Azora con una inversión de 92 millones.
La opinión de los minoritarios
La ampliación de capital del Santander ha perjudicado por partida triple a los pequeños accionistas. Por un lado, se le ha negado la posibilidad de acudir a la ampliación con que van a ver como su participación se diluye a partir del martes. Además, han visto que sus acciones han corto plazo valen menos en bolsa. Los títulos del banco han caído en bolsa para ajustarse al descuento con que se ha llevado a cabo la ampliación, además de una penalización extra al cotizar por debajo de 6,18 euros. Por otro lado, han aguantado un severo recorte del dividendo del 66% hasta los 0,20 euros.
Las acciones del Santander es uno de los valores favoritos por los pequeños ahorradores que depositaban su dinero por la seguridad del dividendo, más allá de la evolución bursátil. La entidad pagaba cuatro dividendos por un valor bruto de 0,6 euros, con lo que ofrecía una
rentabilidad por dividendo alrededor del 8%, frente al 3% que calculan algunos analistas. "Como referencia, BBVA ofrece una rentabilidad por dividendo del 4%, BNP del 3%, Deutsche Bank del 2,9% y Unicredit del 2,2%, por lo que su yield a partir de 2015 quedará en línea con el resto del sector", explican los analistas de Bankinter.
La entidad se ha comprometido a que en los próximos ejercicios elevar el dividendo tras el recorte anunciado, dependiendo de la evolución de los resultados. Promete elevar la remuneración en efectivo entre el 30% y el 40% del beneficio recurrente, en lugar del 20% actual. Según el banco, el Beneficio por acción mejorará a partir de 2016.
Varios de los pequeños accionistas han confirmado a DIRIGENTES que se sienten "absolutamente desconcertados" por esta ampliación a mano de institucionales, que "se ha producido de la noche a ña mañana y sin consultar con nadie". Los accionistas minoritarios se sienten "frustrados" porque cuando invirtieron en el banco invirtieron con la garantía de tener un dividendo del 8%, "y ahora nos vamos a quedar con un tercio de esta cantidad", aseguran a este medio.
"Esto jamás lo habría hecho Emilio Botín", han continuado los accionistas minoritariios contactados por DIRIGENTES. "La actual presidenta ha llegado al banco, ha fulminado al quipo anterior, ha cambiado a buena parte del Consejo y ha hecho esta operación sin contar con todos los accionistas. Emilio Botín nos lo habría comunicado a todos, y nos habría dado la oportunidad en participar en la ampliación". Así, los accionistas minoritarios han mostrado su "miedo" y su "desconfianza" al banco. "No nos vamos ahora porque no hemos recuperado todo lo invertido, pero en cuanto lo recuperemos nos vamos". "Si mañana nos convoca Banco Santander a una ampliación de capital le vamos a dar un corte de mangas", han espetado los minoritarios, enfadados, que por otra parte han confirmado a este medio que no descartan demandar el banco por lo que consideran "una estafa".
Así está la situación para Banco Santander. DIRIGENTES también ha podido conocer de fuentes fidedignas que varios de los dirigentes del propio banco han querido desprenderse de sus acciones en la entidad, algo que les ha sido prohibido.