Se desacelera la actividad en Europa: simple bache o algo más

Los niveles más bajos de los últimos dos meses en Alemania (manufacturas 51,5 y servicios 53,7) y de tres en Francia (49,5 y 52, respectivamente), donde además el primer indicador se sitúa por debajo de la zona de expansión (50). Por su parte, el dato compuesto de la Zona Euro cae hasta 53,8, desde 54,4 esperado y 54,4 en junio.

Este descenso, "ofrece cierto apoyo temprano a nuestra opinión de que la frágil recuperación de la región se desacelerará en la segunda mitad del año", afirma Jennifer McKeown, economista senior de Capital Economics. Este primer indicador de la actividad en el tercer trimestre, añade, "parece consistente, por ahora, con un aumento trimestral del PIB de entre el 0,3% y el 0,4%, frente al 0,4% de del primer trimestre y a nuestra estimación del 0,3% para el segundo".

Ahora bien, parece "muy posible" que asistamos a nuevos descensos en agosto y septiembre, que probablemente apunten a un "crecimiento más débil". Así, aunque los últimos datos sugieren que la crisis griega no ha hecho descarrilar la recuperación de la Zona Euro, "el crecimiento parece estar disminuyendo, ya que los apoyos de la energía y el euro pierden fuerza. Esperamos que el PIB ascienda sólo un 1% o algo más tanto este año como el próximo".

Por su parte, Susan Joho, economista de Julius Baer, considera que los indicadores preliminares de julio tanto de China, como de Japón, la Zona Euro y Estados Unidos, probablemente confirmen las tendencias actuales. A saber: un robusto crecimiento al otro lado del Atlántico, una moderada recuperación en la región de la moneda única y en la economía nipona, y unas condiciones económicas frágiles que deben ser apoyadas por una mayor flexibilización en el gigante asiático.