Siguiendo la estrategia marcada tras la firma de la compra de BG, la petrolera Shell busca reorientar su gasto anual. En su última revisión, Shell planea reducir sus gastos este 2016 hasta los 29.000 millones de dólares, el tercer recorte que hace desde una previsión inicial de 35.000 millones de gastos. Shell planea vender 30.000 […]
Dirigentes Digital
| 07 jun 2016
Siguiendo la estrategia marcada tras la firma de la compra de BG, la petrolera Shell busca reorientar su gasto anual. En su última revisión, Shell planea reducir sus gastos este 2016 hasta los 29.000 millones de dólares, el tercer recorte que hace desde una previsión inicial de 35.000 millones de gastos.
Shell planea vender 30.000 millones de dólares en activos en todo el mundo para 2018 y eliminar las operaciones entre 5 y 10 países y así rebajar su endeudamiento, que alcanzó el 26% tras la compra de BG. También ha anunciado un nuevo plan de recompra de acciones.
De momento la empresa aún no ha especificado de qué países saldrá, pero según Reuters uno de ellos podría ser Gabón.
Shell se apoya en que la venta de activos y el ahorro en la empresa incrementen la rentabilidad del capital para los accionistas en torno a un 10% para el final de la década, asumiendo que el barril de petróleo alcance los 60 dólares, lo que supondría una subida importante desde el 8% registrado entre 2013 y 2015.
Gran parte del ahorro de costes vendrán, además de los 12.500 recortes de empleos de este año, por la integración de las operaciones en distintas áreas, como Australia o Brasil.
El CEO de Shell, Ben van Beurden, se ha mostrado optimista con los nuevos recortes y espera que estos ajustes ayuden a equilibrar las acciones de Share, que han quedado rezagadas de las de sus rivales desde que se anunció la compra de BG en abril de 2015.
Según van Beurden, Shell quiere enfocarse ahora en el crecimiento a corto plazo a través de proyectos en aguas profundas de Brasil y el Golfo de México. Shell asegura que la producción en aguas profundas podría duplicarse hasta los 900.000 barriles de petróleo al día para el año 2020.
"Nuestra estrategia debería guiarnos a una compañía más simple, con posiciones fundamentalmente ventajosas, y menos intensidad de capital. Hoy, presentamos una transformación de Shell", declaró van Beruden.
Apuesta por otros sectores
Pese a la salida de varios países en el negocio petróleo, Shell expandirá su negocio químico, sobre todo en Estados Unidos y China. La petrolera busca enfrentarse a la caída del petróleo con nuevas inversiones alejadas del sector, como una nueva inversión en una planta de polietileno en Estados Unidos.