Con las soluciones de inversión flexible, el gestor no depende de una estrategia cerrada de inversión. Desde la entidad destacan que los fondos alternativos UCITS y especialmente las estrategias relative value y long/short equity se presentan como una de las opciones más claras para los inversores en este sentido. "Pueden ofrecer ingresos atractivos, limitando la […]
Dirigentes Digital
| 06 feb 2015
Con las soluciones de inversión flexible, el gestor no depende de una estrategia cerrada de inversión. Desde la entidad destacan que los fondos alternativos UCITS y especialmente las estrategias relative value y long/short equity se presentan como una de las opciones más claras para los inversores en este sentido. "Pueden ofrecer ingresos atractivos, limitando la sensibilidad de la cartera subyacente al riesgo de subida de los tipos de interés", explican en sus últimas previsiones de mercado para 2015.
Respecto a las estrategias de relative value, los expertos recuerdan que permiten a los inversores obtener beneficios incluso en un contexto marcado por las subidas de tipos de interés de los bonos, y por la ampliación de los diferenciales en el segmento de deuda corporativa. Este estilo de gestión busca aprovechar las discrepancias de precios percibidas entre activos o clases de activos similares.
Los expertos advierten que con las estrategias long/short, que consisten en tomar una posición larga (long) que se beneficia de la subida del mercado y una posición corta (short) a la que favorecen las caídas, los inversores deben adoptar un enfoque neutral respecto al mercado de renta variable. "Estas estrategias tienen como objetivo sacar partido a las anomalías de los precios de las acciones", explican.
Desde la entidad también mencionan la utilidad de los productos estructurados en este contexto, con activos subyacentes diversificados y con naturaleza muy diversa, como el petróleo, oro, índices de renta variable o tipos de interés. Este tipo de productos surgen de la mezcla de varios activos a los que se denomina derivados. En este sentido, señalan que "los productos estructurados pueden conllevar la utilización de instrumentos complejos como futuros, opciones o swaps para mejorar la rentabilidad, sin alargar la duración de la cartera subyacente.
En cualquiera de los casos, desde BNP Paribas aconsejan a los inversores que apuesten por estas fórmulas prestar especial atención a la liquidez. "Es un factor cada vez más relevante en los mercados actuales y, por tanto, conviene comparar el tamaño del fondo respecto al del mercado subyacente, teniendo en cuenta la liquidez diaria o semanal de los fondos UCITS". Del mismo modo, y recordando que este tipo de fondos alternativos se gestionan de manera flexible sin estar limitados por un benckmarck, recuerdan que "es importante asegurarse de que el gestor se ciñe a su estrategia de inversión".
Entre los productos que destaca la entidad destaca el fondo Absolute Return de BNY Mellon, en el que los gestores invierten tomando posiciones long/short en renta variable con operativa de pares (pair trading). Cada par se compone de una idea principal (larga o corta) y de una unidad secundaria de cobertura (valor, sector, mercado, o una combinación de los anteriores). El propósito de esta unidad de cobertura es concentrar el riesgo en los factores de rendimiento específicos que persiguen los gestores. También seleccionan el Parvest V350, que trata de incrementar el valor de sus activos a medio plazo con una volatilidad objetivo de 350 puntos básicos. El Goldman Sachs Strategic Income Bond también se cuela en su lista de seleccionados en estrategias de inversión flexibles, junto con estructurados sobre tipos de interés.