En su comunicado, la agencia destaca el positivo impacto que para la economía española está teniendo la caída del precio del crudo, la depreciación del euro y el programa de estímulos del Banco Central Europeo (BCE). A pesar de mantener invariable la nota respecto a su última revisión de noviembre, estos factores han llevado a […]
Dirigentes Digital
| 10 abr 2015
En su comunicado, la agencia destaca el positivo impacto que para la economía española está teniendo la caída del precio del crudo, la depreciación del euro y el programa de estímulos del Banco Central Europeo (BCE).
A pesar de mantener invariable la nota respecto a su última revisión de noviembre, estos factores han llevado a S&P a elevar en tres décimas las previsiones de crecimiento para el país durante el periodo 2015-2017, hasta el 2,2%, explicando que existe la posibilidad de una nueva revisión al alza. "La deuda neta llegará a su máximo en 2017, cuando alcanzará algo más de 93% del PIB", advierte la agencia, que explica que, ante el calendario electoral, "el Gobierno se desviará de sus ambiciosos objetivos de déficit para 2015 y 2016 del 4,2% y 2,8% del PIB, respectivamente".
"Persisten las incertidumbres sobre un posible cambio de políticas fiscales debido a las elecciones generales y autonómicas de este año", explica la agencia en el comunicado. En este sentido, considera un motivo de riesgo la capacidad de los próximos gobiernos "para preservar el historial de reformas que fomentan la competitividad, y el impacto que un posible cambio de política en el futuro podría tener sobre la principal debilidad de España, su tasa de desempleo desestacionalizada", que destaca que es la segunda más elevada de la Unión Europea.
El mercado laboral ocupa buena parte de la nota remitida por S&P, en la que la agencia destaca el factor positivo de un aumento de la inversión en el sector exportador "aprovechando unos salarios más bajos y una legislación más flexible" que en otros países de la zona euro. Sin embargo, y a pesar de destacar la mejora de la competitividad de la economía nacional, los expertos explican que "aún hay evidencias de la dualidad en el mercado laboral", recordando el elevado coste laboral de los empresarios frente a la media de la OCDE, "con contribuciones a la seguridad social por encima del 20% de los costes laborales totales".