En enero del año 2006 Telefónica llegó a un acuerdo para adquirir O2, la segunda compañía telefónica de Reino Unido, por detrás de British Telecom, por 17.700 millones de euros. Esta elevada cifra catapultó la operación, cómo la de mayor envergadura realizada jamás por una empresa española en el extranjero, superando la compra de Abbey […]
Dirigentes Digital
| 18 nov 2014
En enero del año 2006 Telefónica llegó a un acuerdo para adquirir O2, la segunda compañía telefónica de Reino Unido, por detrás de British Telecom, por 17.700 millones de euros. Esta elevada cifra catapultó la operación, cómo la de mayor envergadura realizada jamás por una empresa española en el extranjero, superando la compra de Abbey National por Banco Santander. Por aquel entonces, la adquisición, permitió a la empresa española entrar en dos de los mayores mercados de telefonía móvil de Europa, el de Reino Unido y Alemania, donde O2 es el tercer mayor operador.
Pero a Telefónica no le bastó sólo con entrar, y por eso, solo pasaron cuatro años hasta que empezó a dominar el mercado, superando en número de clientes a la para entonces operadora número uno, British Telecom. Sin embargo, poco tiempo después, la operadora española descubrió que no estaba sola, y tuvo que empezar a compartir el mercado y los clientes, en este caso, con Vodafone.
La llegada del 4G, a finales del pasado año, tuvo una gran relevancia dada la dura competencia entre las compañías que operan en Reino Unido. Un país que es clave para la propia Telefónica. La operadora registró unos ingresos de 6.692 a finales de 2013. De hecho, Reino Unido se ha convertido en el tercer país para Telefónica, sólo por detrás de España y Brasil. En la ‘batalla’ del 4G también entró Vodafone. Para la compañía, la llegada de esta cobertura a Reino Unido tuvo gran relevancia, para empezar porque es su país de origen. Además, es el segundo país para el grupo en términos de ingresos, sólo por detrás de Alemania.
Ahora, apenas un año después, ambas operadoras han reavivado la llama de la competencia. El detonante ha sido la adjudicación el contrato del operador móvil virtual TalkTalk Telecom, hasta ahora cliente mayorista de Vodafone.
Esta OMV, especializada en servicios de banda ancha fija, televisión de pago y telefonía móvil, pasará a utilizar la red 2G, 3G y 4G de la compañía española, y será la que ofrezca a sus 350.000 clientes de móvil. Con este contrato, que antes firmaba Vodafone, TalkTalk pretende extender su negocio de telecomunicaciones al resto de la clientela de la compañía, que supera los cuatro millones de usuarios.
El grupo TalkTalk, gracias a su alianza con Telefónica, se ha propuesto impulsar sus servicios de cuádruple play, con sus ofertas de telefonía fija, móvil, banda ancha y televisión de pago, y planea desplegar fibra hasta el hogar para ofrecer servicios de banda ancha de bajo precio.
Telefónica, por su parte, no ha querido hacer ningún tipo de declaración a DIRIGENTES a este respecto, pero parece obvio que la ‘teleco’ española no está dispuesta a dejar pasar ni la más mínima oportunidad de entrar, y conquistar, un mercado extranjero. Habrá que esperar para ver cuál será su próximo movimiento.