A pesar de la crisis, o como consecuencia de ella, es necesario rectificar los hábitos de consumo y de vida hacia un sistema viable, respetuoso y sostenible tanto en alimentación, cosmética, bioconstrucción o agricultura. Cada vez estamos más preocupados por nuestra salud desde un punto de vista integral. En el verano de 2014 el concepto […]
Dirigentes Digital
| 04 jul 2014
A pesar de la crisis, o como consecuencia de ella, es necesario rectificar los hábitos de consumo y de vida hacia un sistema viable, respetuoso y sostenible tanto en alimentación, cosmética, bioconstrucción o agricultura. Cada vez estamos más preocupados por nuestra salud desde un punto de vista integral.
En el verano de 2014 el concepto de «belleza» para los españoles consiste en «ser natural y estar bien con uno mismo y con los demás». Según un estudio realizado por un laboratorio farmacéutico (Abbott) nueve de cada diez españoles creemos que llevamos una vida saludable y para conseguirlo las principales medidas que adoptamos son: tomar alimentos saludables para frenar los efectos del envejecimiento (83,3%), seguido del uso de cremas y lociones anti edad (38,3%), tintes de pelo (35,1%), ingesta de vitaminas y minerales (5,5%) y suplementos alimenticios (4,4%).
Según el Consejo Superior de Deportes cada año aumenta el número de practicantes de deporte en casi dos puntos porcentuales. El reflejo de esta preferencia lo demuestra el llamativo ascenso de personas que corren, pasean y van al gimnasio y el triunfo de las dietas Detox, basadas en su mayoría en el consumo de frutas y vegetales y en los productos relacionados con la salud, especialmente los dietéticos, desnatados y light, que han aumentado sus ventas. Y se incrementa también la conciencia sobre lo que nos ponemos en el cuerpo y en cómo tratar nuestro mayor órgano, la piel; se ha disparado la presencia de productos basados en elementos vegetales, y respetuosos con el medio ambiente y han aparecido con éxito nuevos aparatos específicos para la limpieza y cuidado de la piel. Sin olvidar aquellos productos que potencian un aspecto más saludable como son las tierras de sol.
Equilibrio bio
Más de la mitad de las mujeres españolas buscan que sus cosméticos se basen en ingredientes naturales. Esta es una de las razones por la que los principales laboratorios cosméticos orientan sus investigaciones a encontrar los beneficios de los ingredientes vegetales y los conservantes naturales que no son agresivos ni con la piel ni con el entorno. Las propiedades de las algas marinas, del brócoli, las frutas o la acción desintoxicante de la cafeína son algunas de las novedades de esta temporada.
También se acuñan nuevos términos como la "gastrocosmética" o la "neurocosmética" que reflejan esta tendencia bio. La gastrocosmética o cosmética fresca, es una nueva técnica que aúna belleza y gastronomía cuidando el interior y el exterior del cuerpo humano a través de productos frescos y naturales. La neurocosmética estudia las interacciones entre el sistema nervioso y la piel en situaciones de cansancio y estrés. Un cambio más en esta tendencia se produce en la presentación de los productos en su exterior e interior. Los envoltorios (el packaging) siguen unos cánones estéticos más sobrios y sencillos, con menos lujo. Y las texturas de los productos presentan un efecto más fresco, con emulsiones mucho más ligeras que se absorben en pocos minutos y de acción muy rápida.
Más allá de la cosmética
En consonancia con estos cambios las marcas también han cambiado su enfoque hacía la imagen que quieren difundir. Los embajadores de los cosméticos suelen ser algo más que un gran físico. No son solo modelos, son profesionales que aportan su visión del mundo y su actitud como parte de su imagen. Ellos son el rostro de esta nueva tendencia: comer de forma equilibrada, llevar una vida activa y destinar tiempo al cuidado personal utilizando los cosméticos adecuados contribuyen a mantener ese estilo de vida saludable, que según los expertos, buscaremos el próximo verano.