Escrita por Charles Dow en diversos editoriales publicados por The Wall Street Journal a finales de 1800, se considera el fundamento de lo que hoy conocemos como análisis técnico. Y es precisamente su antigüedad su peor "enemigo", pues no son pocos los que la rechazan afirmando que tanto la economía como los mercados financieros son […]
Dirigentes Digital
| 28 sep 2015
Escrita por Charles Dow en diversos editoriales publicados por The Wall Street Journal a finales de 1800, se considera el fundamento de lo que hoy conocemos como análisis técnico. Y es precisamente su antigüedad su peor "enemigo", pues no son pocos los que la rechazan afirmando que tanto la economía como los mercados financieros son muy diferentes ahora.
Seis son sus puntos principales: el precio lo descuenta todo; hay tres tendencias principales de mercado (primaria, secundaria y menor); los movimientos primarios suelen desarrollarse en tres fases (acumulación, consolidación y distribución); los diferentes índices bursátiles deben confirmar las tendencias; y también el volumen de negociación; finalmente, la tendencia se mantiene vigente hasta que haya señales claras de reversión.
Sobre esta base, tres son las condiciones que deben cumplirse para que se produzca una señal de venta: tanto el Dow Jones de industriales como el de transportes deben experimentar una corrección significativa desde nuevos máximos; las subidas tras dicha caída no llevarán uno o ninguno de los índices a nuevos máximos; después, deben caer por debajo de los mínimos de la primera corrección.
Con esto en mente, nos trasladamos a finales de agosto: tanto el Dow Jones de industriales, como el de transportes cayeron al mismo tiempo (25 de agosto) a mínimos de 52 semanas. Esto es, perdieron los mínimos de la corrección anterior (octubre de 2014).
Una señal que causa "angustia" a Jeffrey Saut, estratega jefe de inversión de Raymond James Financial. Y es que, recuerda sólo ha habido una "falsa alarma" de la Teoría Dow en los últimos 18 años.
Fue en mayo de 2010, durante el "flash crash", la última vez que el Dow Jones perdió 1.000 puntos en el intradía, hasta el pasado mes de agosto. Saut espera que en esta ocasión también falle la "señal", pero advierte que si estos dos índices pierden los mínimos del 25 de agosto, habrá que comenzar a plantearse seriamente la posibilidad de un cambio de tendencia.