El precio del barril de crudo Brent se situaba la pasada semana sobre los 51 dólares, su menor precio en casi dos semanas, después del acuerdo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para extender el control de su oferta por otros nueve meses, hasta marzo de 2018. Y los expertos anticipaban una caída continuada de precios en este escenario. Sin embargo, desde Allianz Global Investors advierten a los inversores que no hay que confiarse con esta perspectiva en la tendencia de crudo. Desde el a firma, Neil Dwane explica que pese del reciente episodio con el consecuente desplome en los precios, “creemos que el mercado del petróleo debería moverse más alto debido a la sólida demanda global, las renovadas restricciones en la oferta y la baja inversión, aún significativa. Esto supone un argumento claro para invertir en el sector de la energía, tanto por los ingresos como por el retorno del capital”. En concreto, el experto da 5 argumentos para confiar en el repunte de los precios del petróleo:
- El experto recuerda que la Agencia Internacional de Energía (AIE) redujo sus previsiones de crecimiento de la demanda este año de 1,4 millones de barriles por día a 1,3 millones. Sin embargo, explica que pese a esa rebaja, la demanda mundial se ha mantenido estable. “Al mismo tiempo, los inventarios de petróleo han disminuido y el crecimiento económico mundial es boyante. En conjunto, estos factores deberían apoyar una demanda constante de petróleo a pesar de los precios más altos”.
- Países como México, Nigeria o Venezuela han sufrido los bajos precios del crudo en el pasado. Y el frágil estado de muchos de estos ‘petro-estados’ es precisamente una de las razones por las que la OPEP aspira a aumentar los precios mediante la reducción de la producción.
- El experto recuerda como fuera de la industria del petróleo de esquisto en EEUU, que ha hecho avances significativos en los últimos años, pocas compañías de energía han invertido últimamente en la búsqueda de nuevos yacimientos. “Muchas empresas también decretaron importantes recortes de gasto de capital en 2015-2016”, indican desde la firma, asegurando que ese recorte en la inversión de nuevos descubrimientos reducirá notablemente la oferta.
- Problemas con el shale oil: Dwane recuerda que pese al boom de este mercado en EEUU, muchos productores siguen teniendo un flujo de caja negativo, y los costes están aumentando. Algo que podría poner en peligro a supervivencia de algunas de estas compañías, que pese al apoyo de Trump a la industria nacional, necesita precios más altos para sobrevivir.
- El experto espera una mayor demanda global por parte de países como China o India, donde las producciones están cayendo. Algo que también actuaría como viento de cola para los precios.
Entre las principales conclusiones de su análisis para los inversores destacan las siguientes:
- Los inversores deben tener en cuenta un aumento de los precios del petróleo en el medio y el largo plazo a medida que los inventarios se reduzcan.
- Entre las principales razones para la subida de los precios cabe destacar: los principales productores de petróleo han acordado extender los recortes a la producción, en parte porque muchos petro-estados se están volviendo más frágiles; la mejora del crecimiento mundial debería impulsar la demanda; y los nuevos descubrimientos de yacimientos de petróleo son cada vez más escasos.
- Los precios más altos, buenos para los inversores en el sector de la energía, tienen una desventaja: pueden aumentar la inflación y actuar como un gravamen sobre la actividad económica.
- La inversión en el sector de la energía sigue ofreciendo atractivas rentabilidades de capital y oportunidades de retorno de capital, pero la gestión del riesgo es primordial.