En medio de la tormenta que atraviesa Toshiba a nivel internacional, la compañía ha hecho públicas las previsiones de su segmento profesional para 2016. En este periodo, que comenzó en marzo, la división espera vender 120.000 unidades, en comparación a las 110.000 vendidas en 2015. Además, entre sus previsiones está alcanzar una cuota de mercado […]
Dirigentes Digital
| 01 jun 2016
En medio de la tormenta que atraviesa Toshiba a nivel internacional, la compañía ha hecho públicas las previsiones de su segmento profesional para 2016. En este periodo, que comenzó en marzo, la división espera vender 120.000 unidades, en comparación a las 110.000 vendidas en 2015. Además, entre sus previsiones está alcanzar una cuota de mercado cercana al 20%.
El responsable del área profesional de la compañía para España y Portugal, Emilio Dumas, ha explicado que pese a que la compañía ha decidido cerrar la división de consumo en nuestro país y en el resto de Europa, "tenía una cuota de consumo importante en nuestro país". Sin embargo, ha matizado que era un problema de rentabilidad y que la decisión ha sido directamente tomada desde la sede en Japón. Dumas ha explicado que inevitablemente, los ajustes han tenido que llegar a toda la sede en España, ya que se han producido despidos, pero que son sólo parte del "proceso". Además, ha explicado que en nuestro país, el sector de consumo vendía más dispositivos que el profesional.
En este sentido, el responsable del negocio profesional ha añadido que pese a los problemas que ha supuesto el escandalo de contabilidad de la compañía matriz, "el canal profesional continúa tranquilo", y que están notando que "cuesta más transmitir las cosas buenas que hace la compañía".
Teniendo en cuenta que ahora la compañía se centrará en las grandes cuentas, Toshiba ve en la administración pública (una vez haya nuevo Gobierno) una vía de crecimiento y sostenibilidad. De hecho, acaban de cerrar un importante proyecto con el Instituto Nacional de Estadística. "Esta es la vía a seguir", ha reiterado Dumas.
La empresa calcula además que el mercado de la informática profesional superará las 600.000 unidades vendidas y los 430 millones de euros, aproximadamente un volumen similar al año anterior. Para 2017, sus estimaciones indican un crecimiento del mercado de un 5% y unas ventas de 128.000 portátiles Toshiba.
El PC de sobremesa sigue siendo el segmento más castigado. En 2016, Toshiba prevé una caída de sus ventas de estos dispositivos del 16%, en parte por la renovación de estos ordenadores por portátiles corporativos.
En cuanto al futuro, la compañía tiene todas sus esperanzas puestas en un nuevo equipo, "una solución que garantiza la seguridad 100%". Este, que se presentará en las próximas semanas, consiste en una pantalla con imagen virtual, es decir, no registra ninguna operación. "Es la solución definitiva para empresas como banca, seguros, administraciones públicas, servicios secretos, etc, ya que estos necesitan ser muy sensibles con la seguridad".