Manos Limpias, la acusación popular, ha involucrado en el juicio del caso Nóos directamente al Rey Juan Carlos en los negocios de Iñaki Urdangarín, exhibiendo emails cruzados entre los dos para atraer personalidades en el Valencia Summit. La magistrada ha interrumpido el juicio por ser pruebas no admitidas por la Mesa del Tribunal, pero Urdangarín ha admitido que le pidió ayuda, pero ha negado que estuviera involucrado en sus negocios. El Tribunal no admitido la respuesta.
Iñaki Urdangarín comienza a caer en contradicciones con sus declaraciones previas en la instrucción del Caso Nóos. Ha cambiado la versión para desvincular totalmente a la infanta Cristina, aunque comparte la titularidad de la sociedad Aizoon que recibía los beneficios del Instituto Nóos. A las preguntas de la abogada de Manos Limpias, Virginia López Negrete, Urdangarín ha reiterado que su esposa no realizaba ninguna función en Aizoon.
El marido de la infanta se ha hecho responsable de toda la gestión de la mercantil como las operaciones inmobiliarias y ha explicado que la titularidad de la infanta corresponde a una señal de confianza. Además, ha declarado que la empresa nunca celebraba juntas físicamente. Algo que sí reconoció en la instrucción afirmando que a ellas acudía la infanta Cristina.
Una de las claves del interrogatorio, ha sido el uso de las tarjetas de crédito de la empresa. Urdangarín ha defendido que los gastos que cargaba a la tarjeta los gestionaba su secretaria y sus asesores para decidir cuales eran personales y profesionales. Sobre la tarjeta de la infanta donde se cargaron gastos de peluquerías, entre otros, ha afirmado que siempre la custodiaba él, aunque durante la sesión se ha demostrado que la tarjeta estaba emitida al nombre de Cristina de Borbón y tenía las claves de uso.Con respecto a la visa que tenían tanto Urdangarín como la Infanta, dicha tarjeta era custodiada siempre por Urdangarín. López Negrete va sacando conclusiones al mismo tiempo que pregunta, según le ha hecho notar la presidenta del tribunal, Samantha Romero.
Ayer Urdangarín desvinculó por completo a Doña Cristina de la gestión del Instituto Nóos y de Aizoon, a las preguntas del fiscal Horrach e indicó que la actividad del Instituto Nóos estaba supervisado por Carlos García Revenga, secretario de las Infantas.
