Venezuela y China, ¿matrimonio de conveniencia?

China está llevando a cabo un mayor impulso en economía, sobre todo reforzando lazos de intercambio económico con Latinoamérica. Este acercamiento se está viendo reflejado en la mayor cantidad de exportaciones e importaciones entre un territorio y otro, la asistencia económica del país asiático en los proyectos de inversión y las negociaciones regulares entre dirigentes.

Dentro de estas relaciones, el país con el que más ‘estrechamente’ se entiende China es Venezuela. A principios del año, con la fuerte caída del petróleo, el presidente venezolano Nicolás Maduro viajo a China para llevar a cabo una gira en la que conseguir apoyo financiero. Finalmente, Maduro se volvió a casa con dos préstamos de 5.000 millones de dólares cada uno.

De hecho, según la información facilitada por la Organización de Dialogo Inter-Americano, Venezuela es el mayor beneficiario de la política china de expansión en América Latina. En 2014, este país recibió más de 56.000 millones en préstamos desde el país asiático.

Estas buenas relaciones bilaterales no son de ahora, sino que comenzaron con Hugo Chávez como presidente. Tanto es así que en julio de 2014, poco después del fallecimiento del dirigente, el presidente chino Xi Jinping visitó su tumba situada en el Cuartel de la Montaña, en el centro de Caracas. Esto sucedió en el marco de una gira latinoamericana de Jianping.

En esta gira, Xi Jianping se reunió con dirigentes venezolanos y aunque no firmaron ningún acuerdo, si dejaron estos ‘encaminados’ para rubricarlos muy pronto. Al fin de las reuniones, el Gobierno de Caracas decidió que son 480 los acuerdos de cooperación en diferentes sectores que Venezuela tiene con China.

Ya a principios de este mes, el embajador venezolano en China, Iván Zerpa, aseguró en Pekín que el país asiático "respalda la democracia en Venezuela, nuestra estabilidad y nuestro Gobierno", frente a los intentos "desestabilizadores" que lideran algunos sectores de la oposición. "La estabilidad democrática es una línea política de China en toda Latinoamérica y el Caribe, y la confianza que hay con Venezuela es muy significativa", añadió Zerpa en un encuentro con periodistas.

Armamento

Pocos días después, la Fuerza Armada Nacional de Venezuela recibió un gran lote de vehículos tácticos procedentes de china y fabricados en este país. En este pack había al menos 100 caminos y una docena de ambulancias de diferentes modelos y tamaños.

El armamento ha sido uno de los puntos clave en la mejora de las relaciones entre amos países. Cuando el fallecido Hugo Chávez decidió romper relaciones con Estados Unidos, China estaba entre los países con los que consolidó vínculos. China logró su primer contrato con Caracas en 2006 para el suministro de unos radares.

Desde entonces, Venezuela adquirió la empresa asiática China Electroniscs Import and Export Corporation; la china North Industries Corporation ha venido suministrando a la Guardia Nacional de Venezuela equipos anti motín. Por otro lado, el primer contrato para la compra de aviones chinos se cerró en 2009 y fue por 18 aviones de entrenamiento básico. En los años sucesivos, a estos les han seguido otras aeronaves. Además, China está participando en la ejecución de varias obras de infraestructuras para la Fuerza Armada venezolana. Esta es la construcción de la nueva sede para las cuatro fuerzas que integran el cuerpo de seguridad del país.

Ahora, es Nicolás Maduro el encargado de mantener esta relación. El presidente venezolano ha condecorado a Zhao Rongxian, embajador de China en el país, que ha culminado su misión diplomática aquí.

"Misión cumplida, querido embajador", fueron las palabras del presidente Maduro, en la ceremonia de agradecimiento y reconocimiento a Zhao Rongxian, representante diplomático de la República Popular China en Caracas, durante su despedida como embajador tras 5 años de trabajo.

"Desde la Patria de Bolívar y Chávez, hemos construido con China las bases espirituales, políticas, económicas, de un modelo que responde a ese nuevo mundo de respeto, de equilibrio, concéntrico, multipolar, que estamos construyendo. Nada ni nadie nos detendrá, no habrá obstáculo, es la hora de nuestra América, nuestra hora y la hora de seguir construyendo con China ese mundo que soñó nuestro Comandante Hugo , concluyó el mandatario.