La polémica sobre la reforma del emblemático edificio de Madrid se reaviva por las declaraciones del máximo dirigente de Wanda en la televisión china, en la que afirma que tienen permiso para demolerlo en su totalidad, contra la voluntad del Ayuntamiento que exige que se respete la fachada. "El Ayuntamiento ha vuelto a hablar con nosotros diciendo que sí podemos demolerlo. Estamos esperando un documento escrito en lugar de una promesa verbal".
Wang ha añadido sobre el rascacielos: "Es un edificio emblemático, pero no histórico. Por su localización, en frente del Palacio Real y alrededor de varios edificios del gobierno, tiene un valor simbólico. Pero mucha gente sabe que edificio España no está protegido por su valor histórico, de hecho se hizo hace 50 años".
"Como el nuevo Gobierno no estaba de acuerdo, no quisimos provocar más y anunciamos la intención de venderlo y cancelar la inversión. Planeamos también otro proyecto turístico mayor que finalmente trasladamos a Francia. Entonces los ciudadanos españoles presionaron al Gobierno porque la situación laboral en el país es precaria. Ahora el Ayuntamiento ha vuelto a hablar con nosotros diciendo que sí podemos demolerlo, pero estamos esperando un documento escrito".
"Al hacer negocios con los Gobiernos en occidente, el cambio de dirección política debe ser tomado en consideración. Este caso es una buena lección para las
empresas chinas que tienen planes de invertir en el extranjero. Tienen que ser cautelosas al invertir en proyectos sin obtener el permiso oficial de planificación", añadió Wang.