Indicadores para el parón económico

España creció en 2015 un 3,2%, a niveles previos a la crisis, con un crecimiento intertrimestral del 0,8%. El ritmo de crecimiento está amenazado por la inestabilidad política y la ralentización de los emergentes. El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha admitido que la economía podría caer por debajo del 0,8% en el primer trimestre. Todavía es pronto para hacer una previsión fiable, pero ha advertido que hay indicadores "contradictorios" que reflejan una desaceleración.
 
Hoy se ha publicado un dato preocupante, respecto a la producción industrial al caer 2,8 puntos de diciembre a enero. El sector sigue creciendo con una tasa anual del 0,7%, pero muy inferior al 3,5% de diciembre y del 6,1% de noviembre.
 
El comienzo del año tampoco ha dado buenas noticias respecto al mercado de trabajo. El paro ha vuelto a ascender en enero y febrero. En el primer mes del año se explica por el fin de la campaña de Navidad, pero en los dos últimos años en febrero se había reducido. En concreto, subió en 2.231 personas, un repunte nimio pero puede ser indicativo que la mejora del mercado se está reduciendo, después de caer en 678.200 personas en todo 2015.
La cifra preocupa más si se observa los datos de afiliación a la Seguridad Social, que representan la creación de empleo. Creció en 63.355 personas, pero es un 34% inferior a la registrada hace un año. Por primera vez en doce meses, la tasa interanual del número de afiliados cae por debajo del 3%.
 
Otra referencia importante que aporta la Seguridad Social es el número de empresas que cotizan al sistema. En enero, descendieron en 8.000 hasta las 1.455.546 empresas, un 0,55% inferior que a diciembre, y enlaza tres meses consecutivos de descensos.
 
Una parte importante de la economía son las expectativas a futuro, es decir la confianza que hay en la economía. La confianza del consumidor cayó 3,9 puntos este en relación al mes anterior, hasta situarse en 95,2 puntos, arrastrada por el retroceso de las expectativas y por la peor valoración de la situación actual, según los datos publicados este jueves por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Es importante porque los registros de crecimiento del año pasado se basaron en la fuerza de la demanda interna, parte de ella corresponde al gasto de los consumidores.
 
Si las expectativas son malas, los consumidores suele aplazar su gasto y decantarse por el ahorro. El indicador de expectativas, de la confianza del consumidor, retrocedió 3 puntos, hasta los 102,7 puntos, principalmente afectado por las peores perspectivas del mercado laboral y la percepción actual de la economía.
 
Uno de los indicadores adelantados más importantes es el PMI de servicios y de la industria. El manufacturero se mantiene en máximos precrisis, pero el de servicios, que aporta a la economía española el 70% del PIB y da trabajo al 65% de la población laboral,  retrocedió por tercer mes consecutivo en mínimos de noviembre de 2014. El sector continúa en expansión pero con una clara desaceleración.

hemeroteca

Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *