Los activos no cotizados, caso del capital privado, inmobiliario, infraestructuras y deuda privada, sólo representan el 7% de las carteras de los fondos de pensiones españoles en la actualidad. Y eso que, según explican desde Mercer, los “mercados no cotizados ofrecen una prima de iliquidez más elevada para compensar la fidelidad del inversor al invertir a largo plazo, con rentabilidades que oscilan entre el 6% y el 13%”.
Desde la firma de asesoramiento y soluciones tecnológicas llaman la atención sobre la forma de diversificar en los productos de este tipo nacionales, tan solo entre renta fija y renta variable, frente a lo que ocurre en el mundo anglosajón, donde esta diversificación en los planes de pensiones se busca también a través de activos no cotizados y alternativos.
En este sentido, explican que la inversión en mercados privados resulta muy conveniente para los fondos de pensiones, porque comparten la características de la iliquidez y del largo plazo. Además, destacan que son óptimos para invertir de forma responsable gracias a la capacidad de influencia que permiten. “Las Comisiones de Control de los fondos de empleo españoles deben familiarizarse con este tipo de activos ya que los intereses del inversor y el gestor están mejor alineados. Para que este último sea remunerado, primero deberá retribuir al inversor por encima de un mínimo de rentabilidad acordado”, apunta Jorge Bernaldo de Quirós, responsable de inversiones en Mercer.
Junto a ello, destaca que la alternativa de los mercados no cotizados permite optar a oportunidades más amplias que las presentes en los mercados cotizados, además de ofrecer “una prima de iliquidez para recompensar la fidelidad de la inversión a largo plazo» e implicar «una menor volatilidad”.
En concreto, ha elaborado un listado de los activos que mayor relación rentabilidad/riesgo demuestran. En primer lugar, estaría el capital privado, que exige una permanencia larga de entre 10 y 12 años pero permite rentas de entre el 10 y el 13%. Después iría la inversión en activos Inmobiliarios (rentabilidades de entre el 8 y el 11%), seguida por la inversión en infraestructuras ( 7 al 10%) y, por último, de la deuda privada, que puede ofrecer rentabilidades de entre el 6 y el 9%.
2020-06-25 05:11:01