La ultima aprobación que ha ejecutado el FMI a la hora de aceptar la entrada del Yuan, o Renminbi, en su cesta de divisas, ocasionará movimiento en las reservas de monedas que poseen los diferentes bancos centrales y previsiblemente una apreciación de la divisa China, por el simple aumento de la demanda de la misma. Este acto ocasionará, a vistas del FMI una mayor estabilidad global y un mayor control sobre una divisa que con el paso del tiempo y la creciente irrupción económica del gigante asiático, se considera ya hoy por hoy una moneda sumamente importante en las transacciones económicas mundiales.
La aprobación ya está en marcha, pero hasta finales del próximo año no se hará efectiva, con lo que se nos plantea un largo periodo de tiempo, en el que tendremos que tener en cuenta diversos factores, para poder estimar los movimientos que se podrían dar en el mercado.
Principalmente, debemos considerar las dos únicas monedas que cotizan frente al yuan, que en este caso son el dólar y el yen. Para adquirir yuanes es condición necesaria, primero hacerse con las monedas frente a las que cotiza, con lo que debemos estimar siempre, y cuando los bancos centrales no aumenten su volumen de reservas, que los mismos se desharán en forma de venta de otras monedas, para generar la liquidez necesaria en ese paso intermedio que deben ejecutar.
La moneda que por coyuntura económica puede ver una depreciación más significativa, principalmente por el exceso de oferta que se dará en ese escenario, es el euro. A la ya conocida devaluación de la moneda única por la política de estímulo monetario que está llevando a cabo el BCE, debemos sumarle también la modificación de pesos dentro de la cesta que ha realizado el FMI donde la divisa más perjudicada es la europea reduciendo su peso cerca del 7%. Esta fuerte entrada del Renminbi con un peso del 11% se irá incrementando con el plazo del tiempo ya que desde finales de 2013 la divisa supera al Euro en empleo de financiación comercial a nivel mundial.
En la lista de deberes de China, queda el continuar la liberalización de su moneda y hacer más transparente su mercado para que los inversores puedan posicionarse con mayor estabilidad.
La corona de referente económico mundial será difícil de conseguir para el gigante asiático ya que el futuro fortalecimiento del dólar hará más atractiva a la moneda y los problemas de crecimiento en China podrían provocar la quiebra de importantes empresas y alejar al inversor internacional. En medio de este mar de dudas, la incorporación en los DEG es un premio a la recientes reformas de China que se espera se mantengan en el tiempo.
Jorge López es analista de XTB.
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