La medida más mediática de Montoro para mitigar el impacto negativo de los escándalos de corrupción relacionados con el Gobierno se queda a mitad de camino de lo prometido, la publicación de una lista con nombres y apellidos de defraudadores y deudores con Hacienda.
El Congreso ha aprobado la reforma de la Ley General Tributaria que permitirá esta medida y que incluye excepciones. La lista de morosos que publicará el Gobierno en la última parte del año informará de las deudas impagadas por las medianas empresas abocadas a la insolvencia, pero no incluirá los nombres de los mayores defraudadores, ni los que se acogieron a la amnistía fiscal de 2012, ni los incluidos en la Lista Falciani.
Sólo se publicará los deudores de más de un millón de euros al fisco hasta el 31 de julio una vez que haya finalizado el periodo de pago voluntario, quedando excluidos los que tengan deudas aplazadas o suspendidas. Por lo tanto no saldrá los contribuyentes a los que la Agencia Tributaria ha descubierto importantes deudas y ha sancionado, si paga la sanción o se encuentra en tramitación.
Desde el sindicato de los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) subrayan que que la publicación de la lista con los delitos fiscales incluirá a las personas y empresas condenadas por sentencia firme, aunque no se conocerán las deudas millonarias descubiertas a las mayores empresas del país, que generalmente no se envían a la Fiscalía porque se entiende que las grandes corporaciones no tienen ánimo de defraudar.
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