El nuevo paradigma empresarial ha favorecido la aparición de un nuevo concepto en las oficinas, la movilidad. Es en este marco donde empresas como Samsung, referentes en el sector tecnológico, ponen al servicio del usuario, tanto final como profesional, toda la innovación de sus dispositivos móviles, para dar una respuesta eficaz a las necesidades de las empresas.
A través de smartphones o tablets, el trabajador móvil puede, por ejemplo, gestionar su correo electrónico o compartir documentos de alta importancia. La movilidad, por tanto, ya no es una estrategia que puedan o no adoptar las empresas. Es una realidad que abarca todos los procesos de negocio y que ha transformado radicalmente nuestra forma de comunicarnos y de estar conectados.
Esta movilización de las empresas proviene en gran parte del fenómeno de consumerización de la tecnología que se ha producido en los últimos años. La tecnología de consumo de empresas como Samsung y que utilizamos tanto en nuestras casas como para nuestras actividades de ocio, ha avanzado a pasos agigantados. Y los usuarios esperan que la tecnología que utilizan en sus puestos de trabajo les ofrezca la misma usabilidad, riqueza funcional y rendimiento. A todo esto se suman los enormes flujos de datos que deben manejar las organizaciones y que no harán más que crecer en los próximos años conforme se vaya consolidando el Internet de las Cosas (IoT).
Puede leer este reportaje completo en la revista DIRIGENTES del mes de julio/agosto.
hemeroteca
