La economía mundial crecerá al ritmo más lento en seis años, según la OCDE. "La política monetaria no puede funcionar por sí sola", advierte la entidad presidido por José Ángel Gurría. "Se necesita una respuesta colectiva más fuerte para reforzar la demanda", añadió, pidiendo a los países que tengan capacidad de expansión fiscal que eleven la inversión pública en proyectos de infraestructuras.
Estados Unidos y Alemania sufrieron los mayores recortes entre las economías desarrolladas, con una reducción en la previsión de la OCDE de medio punto porcentual este año para ambos al 2,0 por ciento y al 1,3 por ciento, respectivamente.
El organismo espera que el crecimiento de EEUU y la zona euro se ralentice desde el año anterior, al 1,4 para la zona euro, y que luego suban marginalmente en 2017 al 2,2 y al 1,7 por ciento, respectivamente.
La OCDE mantiene su pronóstico para China con un crecimiento del 6,5% este año, 6,2% el siguiente, pese a las turbulencias que ha generado y el temor de que la desaceleración sea más brusca de lo previsto. Para India mejora una décima su previsión de PIB al 7,4% en 2016, mientras espera que Brasil caiga un 4%, 2,8 punto menos que en la anterior previsión.
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