En concreto, la ocupación hotelera en julio fue del 72,9%, un aumento del 6% respecto al año anterior, que ya marcó un récord en cuanto a cifras de turistas.
El sector hotelero español comenzó a experimentar una recuperación en la segunda mitad de 2014 y los empresarios se han mostrado optimistas por el aumento de visitantes estimado para el año, así como por el trasvase de turistas de otros destinos mediterráneos considerados menos seguros, como Turquía, Egipto y Túnez.
El turismo es una de las principales palancas del crecimiento de la economía y el empleo en España, representando alrededor del 11% del PIB.
En julio se registraron 42,8 millones de pernoctaciones en establecimientos hoteleros, un 7,4% más que en el mismo mes de 2015, impulsadas por las llegadas de no residentes (+8,2 por ciento), principalmente británicos y alemanes. Los precios hoteleros y su facturación subieron en el séptimo mes del año, con un precio medio diario por habitación de 69,6 euros, un 13,3% más que año anterior.
El destino más solicitados por los turistas extranjeros fueron una vez más las Islas Baleares, cuyas pernoctaciones aumentaron en junio un 4%, seguido de Cataluña y Canarias.
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