Intel ha sido la primera tecnológica en presentar sus cuentas en 2016. El fabricante de microprocesadores obtuvo un beneficio neto de 11.420 millones de dólares, un 2,4% menos respecto al año anterior. Sin embargo, su unidad de Internet de las cosas aumenta su facturación más de un 7%. Puede decirse que, aunque no cumplió con las expectativas fijadas con el mercado, estas cifras están no distan mucho de lo esperado.
Esto significa que ha empezado la ronda de presentación de resultados para las grandes compañías tecnológicas, pero algunas saldrán mejor paradas que otras en lo que se refiere al último trimestre de 2015, y también a su ejercicio anual.
Una de las mejor posicionadas para dar la sorpresa es Samsung, que aunque sus últimos resultados no han conseguido convencer al mercado, ha publicado sus previsiones. Según estas, Samsung estima un beneficio operativo de 18.747 millones de euros (26,37 billones de wones) en 2015, lo que supone un 5,4% más que el ejercicio anterior. Por su parte, las ventas del gigante surcoreano ascenderían a 153.227 millones de euros (200,34 billones de wones), lo que representa un 2,9% menos que en 2014, según estos datos provisionales.
Apple, el mayor competidor de la compañía coreana tiene ya fecha de presentación, el próximo martes 26 de enero, pero sus cuentas son una incógnita. Varios analistas revisan a la baja sus previsiones y coinciden en señalar que Apple comercializará menos terminales en 2016 que en 2015 debido al exceso de inventario y la caída de la demanda. Por otro lado, según un comunicado de la propia compañía, Apple generó ventas de 1.100 millones de dólares durante las últimas dos semanas de 2015. Esto representa una cifra récord para la empresa de Cupertino. Por esto, puede que las próximas cuentas sean bastante suculentas, pero que poco a poco vayan bajando en trimestres posteriores.
Alphabet (Google) es una de las grandes tecnológicas que no han querido hacer alusión alguna a sus cuentas, pero todo indica a que seguirán la misma dinámica que las referentes al tercer trimestre de 2015, que cumplieron las altas expectativas fijadas por los analistas. Una de las principales pistas para seguir la evolución de la matriz de Google es que los expertos han fijado el valor de Alphabet en Wall Street en 1.000 millones de euros más de lo que lo hacía a finales de 2015. Ni los vaivenes del mercado, ni los temores por la evolución del yuan en China, ni la caída del crudo, ni las tensiones geopolíticas han sido suficientes para que los expertos reduzcan las previsiones de crecimiento en el parqué a 12 meses de la compañía. Más bien todo lo contrario.
Este incremento coloca a la firma estadounidense con 230.000 millones de euros de valoración y que la sitúa como la empresa a la que los expertos más han elevado su valoración desde que dio comienzo el ejercicio y que demuestra la confianza que los expertos tienen en la compañía (el 90% de las firmas de inversión que siguen el valor recomienda tomar posiciones en ella).
Facebook, por su parte, concluyó el 2015 con la maquinaria publicitaria a pleno vapor y con nuevos hitos alcanzados, como el de haber superado los 1.000 millones de usuarios activos diarios por primera vez y ser una plataforma cada vez más usada en móviles. Habrá que esperar para ver si estas cifras se han traducido en beneficios, pero como en ocasiones anteriores, parece que la apuesta por el desarrollo e innovación, dará sus ‘frutos económicos’.
En la otra cara de la moneda encontramos compañías como Yahoo, Microsoft o IBM, que ejercicio tras ejercicio han visto como sus beneficios menguaban y perdían la confianza del mercado. Microsoft registró 3.200 millones de pérdidas en el tercer trimestre de 2015, pero fue en gran parte por la pérdida de valor de sus activos de Nokia, por lo que el cuarto trimestre podría no recibir un castigo tan elevado. Sin embargo, el acumulado del año, donde sí se reflejarán estas pérdidas, podría ser decepcionante.
Los ingresos de IBM cayeron en el tercer trimestre del año pasado por decimotercer trimestre consecutivo, un auténtico récord negativo. A esto se suma que a finales de 2015, el gigante tecnológico cayó a su precio más bajo en cinco años después de confirmar que la Comisión de Valores estadounidense (SEC) estaba investigando sus cuentas. Con esta situación aún sin resolver, puede que el parqué neoyorkino imponga un castigo demasiado severo a la empresa.
Yahoo es caso aparte, la compañía atraviesa el peor momento de su historia. El fondo Starboard Value, dueño del 0,8% de la firma, ha informado que "los inversores han perdido toda la confianza" en el liderazgo de Yahoo. Además, las últimas informaciones apuntan a que la tecnológica está trabajando en un plan para reducir su fuerza laboral en al menos un 10% y podría iniciar el proceso este mismo mes. ¿Harán las cuentas trimestrales naufragar aún más a este gigante?
hemeroteca
