Somos un país de amantes del buen comer. Prueba de ello es que la gastronomía es una de las características más importantes para los españoles a la hora de elegir el destino de sus vacaciones. Para un 56%, la comida ocupa el puesto número uno en la lista de elementos necesarios para que unas vacaciones sean perfectas, por delante del relax (52%), ver cosas nuevas (51%), el buen tiempo (43%) o el paisaje (39%). Sentarse a la mesa es un acto social en España y en muchos otros lugares del mundo, y algunas de las tradiciones que acompañan este momento son bastante peculiares. Un 65% de los españoles tiene previsto viajar más que el año pasado al extranjero, y por eso lastminute.com ha elaborado una lista con algunas de las costumbres más extrañas del mundo a la hora de sentarse a la mesa, para ayudarnos a disfrutar de ese momento y tener una buena digestión, sin importar cuál sea nuestro destino. 1. Prohibido cortar la lechuga con cuchillo. Si prepara una ensalada en Francia, tenga cuidado de no cortar la lechuga con cuchillo. Utilice en su lugar las manos o una tijera de cocina. Hay una explicación para esto: en el pasado, los cuchillos eran de plata, y este metal se oxida y oscurece al contacto con el vinagre. Hoy en día los cuchillos están hechos con otros metales, pero en el país vecino la tradición permanece intacta. 2. Los mayores, primero. El respeto a los mayores es un pilar fundamental de la cultura de Corea del Sur, y esto se traslada a la hora de comer. Si viaja a este país, asegúrese de no empezar a comer antes de que la persona más mayor de la mesa haya probado su plato. Sería una falta de respeto muy grave y le puede costar una indigestión. 3. Use siempre la mano derecha. En Oriente Medio, India y algunos países africanos, los zurdos se enfrentarán a un reto a la hora de sentarse a la mesa. La mano derecha es obligatoria para comer, y la izquierda se reserva para tareas menos glamurosas como por ejemplo la higiene personal. Si por cualquier motivo no puedes usar la mano derecha, es mejor pedir disculpas y no comer, antes que usar la mano izquierda. 4. Fideos con mucho ruido. En Japón, los fideos, cuanto más ruidosos, mejor. La cultura japonesa establece que cuando se comen fideos, hay que sorberlos. Hay muchas razones para esto: sorber ayuda a apreciar mejor el sabor, a que se enfríen los fideos más rápidamente, y además es un signo de aprecio al cocinero. Cuanto más ruido hagas, mayor satisfacción demostrarás por el plato. 5. No pida sal ni pimienta. Si va a Portugal, no se le puede ocurrir pedir sal o pimienta si no quiere ofender al cocinero. Es de mala educación, ya que se puede interpretar como que la comida no tiene sabor. 6. Sólo vino o agua. La gastronomía es una de las cosas más valoradas en Italia, y por eso los italianos tienen una larga lista de costumbres y tradiciones cuando se sientan a la mesa. Si viaja a este país, tenga cuidado, por ejemplo, con no pedir queso extra para la pizza, ya que sería un gesto muy grosero. Tampoco se puede compartir la pizza, debe comérsela usted solo. Y para beber, pida agua o vino. Nunca otro tipo de bebidas, si no quiere que le tomen por un turista inexperto. 7. No rellene su propio vaso. En Japón encontramos otra costumbre peculiar a la mesa: prohibido rellenar su propio vaso. Si lo hace, estarás revelando una cierta adicción al alcohol. Lo correcto es llenar primero el vaso de la persona que está a su lado, y después esperar a que tus acompañantes hagan lo propio con el suyo. Además, cuando llene el vaso de otra persona, asegúrese de que la etiqueta de la botella apunta hacia arriba, y no empiece a beber hasta que todo el mundo haya sido servido y esté listo para hacer el primer brindis. 8. Si termina la botella, paga la siguiente. En Armenia, la persona que bebe el último trago de la botella está obligada a pagar la siguiente. Por eso, aunque pueda resultar tentador vaciarla en el vaso de otro comensal, lo más educado es hacerlo en el suyo propio. Sobre todo si está en una reunión de negocios y quiere meterse a sus acompañantes en el bolsillo. 9. No limpie el plato. Por mucho que le haya gustado la comida, no se le ocurra rebañar el plato si está en China. En muchos países no dejar nada en el plato es una buena señal, pues significa que todo estaba delicioso. Sin embargo, en China y otros países asiáticos limpiar el plato será interpretado como que no le han servido suficiente comida. Así que si visita estos países, olvídese de limpiar el plato con el pan sobrante, si no quiere disgustar a su anfitrión. 10. La cuenta entera, por favor. Cuando salga a comer o cenar en Francia, asegúrese de llevar la cartera llena. En el país galo es un gesto de mal gusto dividir la cuenta de un restaurante. Hablar de dinero no es un tema que se deba tratar a la mesa, y por eso lo más correcto es ofrecerse a pagar la cuenta completa, o dejar que alguien lo haga por ti.
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