El estudio “Future State of the Investment Profession” elaborado por CFA Institute concluye que la industria de la inversión se enfrenta a una “encrucijada existencial” en la que sus líderes y profesionales deberán transformarse, si no quieren poner “en peligro el futuro de sus empresas”. El documento identifica una serie de megatendencias que deberán emplear como herramientas para orientar y modificar su modelo de negocio para sobrevivir y, en última instancia, mejorar los resultados del inversor final. “Nuestra industria se encuentra en un punto de inflexión, donde éxito y fracaso conviven en equilibrio”, apunta Paul Smith, presidente y CEO de la organización. “Los líderes del sector tomarán decisiones en los próximos cinco años que tendrán un impacto no sólo en sus firmas, sino también en todo el panorama de los profesionales de la inversión tal y como lo conocemos actualmente”. Entre las megatendencias destacadas por el informe se encuentran los avances tecnológicos, la redefinición de las preferencias de los clientes, las nuevas condiciones macroeconómicas, o los diferentes regímenes regulatorios que reflejan cambios geopolíticos y demográficos. “Sea cual sea el futuro, los líderes de la industria de la inversión necesitarán nuevas habilidades y necesitarán reclutar y formar a los empleados en estas nuevas dimensiones”, añade Roger Urwin, coautor del análisis y presidente del Future of Finance Advisory Council de CFA Institute. “Habilidades como la creatividad, la empatía o la negociación en situaciones complejas serán cada vez más importantes”. En concreto, la organización señala cuatro áreas clave para el futuro: transformación profesional (desarrollo de una mentalidad y prácticas que asemejen a la industria a profesiones como la medicina o la legislación), implementación fiducidaria, nuevas habilidades para nuevas circunstancias (encontrar un liderazgo que pueda articular una visión convincente e inculcar una cultura ética); normas estrictas para restablecer la confianza en la industria. “Este informe muestra claramente la necesidad crítica de que las empresas de inversión se adapten más rápidamente a las nuevas condiciones. Las organizaciones necesitan transformarse a medida que entramos en una nueva era de inversión global”, destaca Smith. “Como conductores de esta transición, los líderes de la industria tienen el futuro en sus manos y deben demostrar su propósito y pasión por servir a otros, mostrar a los inversores el valor de lo que hace el sector e incrementar la confianza”. Principales conclusiones de la encuesta El 73% de los profesionales de la gestión de inversiones consultados cree que en los próximos 5-10 años los factores ambientales, sociales y de gobernanza serán más influyentes; también el ascenso en importancia de los hubs de Asia-Pacífico (70%). Además, el 84% espera que la industria se consolide; un 70% aguarda más activos en vehículos de inversión pasiva; y el 63% que los márgenes de beneficio permanezcan planos o se contraigan. En cuanto a nuevas oportunidades, el 55% señala a la globalización; y el 49% a las nuevas tecnologías.
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