El INE destacaba en su nota informativa que la creación de empleo marcaba el mayor ritmo desde 2006. El número de ocupados ha crecido en 182.200 personas, hasta un total de 18.048.700. Es la primera vez que se supera la cota de los 18 millones de personas trabajando desde finales de 2011. Sin embargo, en el tercer trimestre los puestos de trabajo que se han generado han sido temporales. El total de asalariados con contrato indefinido descendió en 18.900, mientras que el de asalariados con contrato temporal aumenta en 205.500. En los últimos doce meses, se confirma que el trabajo temporal está tirando de la creación de empleo.
La otra variable para medir la precariedad del empleo generado es el tipo de jornada. El número de trabajadores con jornada parcial bajó en el tercer trimestre un 2,14% hasta los 2,82 millones de personas. En los últimos doce meses, este tipo de trabajo se ha incrementado en un 4,8%. Lo más preocupante es que el peso de este tipo de jornadas gana peso en el mercado laboral. La tasa de temporalidad pasa del 15% al 15,24%.
Baja la población activa
Otro punto que se puede rebatir es el descenso del paro. En la última EPA el número de desempleados descendió en el tercer trimestre en 298.200 personas hasta un total de 4.850.800 de parados y la tasa de paro desciende hasta el 21,1%, el nivel más bajo desde el segundo trimestre de 2011. Pero la caída no se explica sólo por la creación de empleo, también por la reducción del tamaño del mercado laboral. El INE también mide el número de población de activa, aquellas personas mayores de 16 años que están en condiciones de trabajar. En el tercer trimestre experimentó un descenso de 116.000 personas en el tercer trimestre, hasta 22.899.500, destacando especialmente la caída de 121.500 en el número de mujeres activas, mientras que el de hombres ha crecido en 5.400. Se situó en niveles del segundo trimestre de 2008. Es un dato importante, porque la tasa paro se calcula teniendo en cuenta el número de desempleados sobre la población. A menor población activa, más fácil es que baje la tasa de paro.
Desde 2012 la población activa ha caído en picado, el mercado española ha perdido una fuerza laboral de 600.000 personas. Se explica por el envejecimiento de la población, por la salida de inmigrantes que no encuentran trabajo, por nacionales que buscan oportunidades fuera del país y personas que han perdido la esperanza de trabajar, aunque estén disposición de hacerlo. Este grupo de personas también son contabilizados en la reducción del número de parados.
Desequilibrio por zonas
El paro no está descendiendo por igual en todas las Comunidades. Los mayores descensos del número de parados durante el tercer trimestre se han dado en Cataluña (66.600 personas menos), Madrid (57.200) y Galicia (29.600), mientras que el mayor incremento del desempleo ha registrado en Andalucía (21.500). Navarra ha contabilizado la tasa de paro más baja (13,57 %) y Andalucía, la más alta (31,73 %). En variación anual, todas las Comunidades Autónomas, salvo Extremadura, presentan incrementos de ocupación. Los mayores se observan en Andalucía (147.100 más), Comunitat Valenciana (92.900 más) y Canarias (69.600).
El empleo cae en agricultura y construcción
El número de ocupados aumenta este trimestre en los Servicios (210.200 más) y en la Industria (13.100). En cambio, desciende en la Agricultura (30.900 ocupados menos) y en la Construcción (10.300). En el último año el empleo ha subido en todos los sectores. En los Servicios hay 349.400 ocupados más, en la Industria 91.800, en la Construcción 60.100 y en la Agricultura 43.400.
hemeroteca
