Los inversores están cambiando su dinero en los fondos de inversión y se puede apreciar un incremento de entradas de capital en los fondos bajistas, aquellos que se benefician cuando el mercado cae. Tal y como informa Bloomberg, alrededor de 218 millones de dólares se han marchado de los ETFs que tenían como referencia el S&P 500. Mientras que, los fondos bajistas han registrado entradas que triplican esa cantidad, por lo que se quedarían cerca de los 700 millones. Es su mejor captación desde julio de 2016.
El fondo bajista ProShares Short S&P 500 ETF, que tiene 2.300 millones de dólares bajo gestión, registró su mejor semana desde 2010 al anotar entradas por 380 millones.
A pesar de que el S&P ha repuntado más de un 11% desde los mínimos de diciembre, el sentimiento sigue siendo de nerviosismo e incertidumbre. “Tuvimos un diciembre muy duro y puede ser que los inversores minoristas estén respondiendo a esto con estos movimientos”, asegura Timothy Moe, jefe de estrategia para Asia y el Pacífico en Goldman Sachs. “Es una clara indicación de confianza.”, apostilló.
Señalan diversos expertos, que este movimiento del mercado puede deberse a un reajuste de las carteras y una manera de cubrirse un poco las espaldas. Aquellos que tenían ETFs que tomasen como referencia las bolsas americanas registraron grandes pérdidas el pasado diciembre. Por eso, una manera de paliar esto es guardar un porcentaje de la cartera para los fondos bajistas, dada la volatilidad del mercado.
Cabe destacar que 2016, 2017 y los tres primeros trimestres de 2018 fueron bastante buenos para las bolsas, con una volatilidad anormalmente baja. Sin embargo, el horizonte de la ralentización económica se avecina y junto con ello el cambio de rumbo de los dos principales bancos centrales, como la Reserva Federal y el BCE. Por tanto, tener posiciones bajistas es una manera de cubrirse y de frenar las perdidas.
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