Keir Starmer se ha convertido en el Primer Ministro del Reino Unido tras las elecciones generales del país. Una victoria que devuelve a los laboristas al poder tras más de catorce años alejados de Downing Street. Un cambio en el país que ha sido bien recibido por los mercados debido al perfil moderado de Starmer, quien se ha mostrado favorable al mundo de la empresa, al comercio con la Unión Europea y a la descarbonización de la economía.
Una agenda que no parece generar incertidumbre o miedo, aunque algunos fondos de inversión y grandes patrimonios han realizado consultas por si la fiscalidad se volviera más agresiva y tuvieran que salir del Reino Unido buscando un lugar más amable para los grandes patrimonios y la inversión. Sin embargo, no parece ser este el escenario principal.
¿Qué esperar del nuevo gobierno de los laboristas?
“Dado que los laboristas han prometido atenerse a las «normas fiscales» vigentes en materia de endeudamiento público, los inversores en gilt afrontan el acontecimiento con relativa tranquilidad”, asegura Gordon Shannon, Director de TwentyFour Asset Management.
Una visión también compartida por Orla Garvey, gestora sénior de carteras de renta fija de Federated Hermes Limited, que señala que “las políticas del nuevo Gobierno serán, por supuesto, diferentes. No espero que un nuevo Gobierno tome la iniciativa con un movimiento político drástico a corto plazo, ya que habrán aprendido de los errores del pasado. Esto aleja un poco los riesgos asociados a las elecciones británicas”.
Con esto sobre la mesa, parece que los sectores que más cambios pueden registrar con la llegada del nuevo gobierno son la vivienda, la energía, el transporte y los servicios financieros, que parecen estar llamados a beneficiarse de la agenda de crecimiento que se ha establecido.
“La «ecologización» de estos sectores ofrece enormes oportunidades a los inversores. La ambición, la concienciación y una hoja de ruta clara son garantías útiles para las empresas y los inversores. El apoyo a los planes de mejora de la infraestructura de los vehículos eléctricos y la fabricación nacional de baterías harían del Reino Unido un destino más atractivo para el transporte ecológico”, sostiene Louise Dudley, Gestora de Cartera de Renta Variable Global de Federated Hermes Limited.
Por otro lado, el estrechamiento de los lazos con la UE es otro posible factor positivo para las pequeñas empresas, que han tenido dificultades con la burocracia regulatoria adicional desde el Brexit, aunque se trata de un paso a más largo plazo. A corto plazo, se espera una continuación del statu quo para las empresas. El presupuesto de otoño será muy importante para establecer las perspectivas de las empresas británicas para 2025.
Otros aspectos importantes en la economía del Reino Unido
Por otro lado, las reformas que los laboristas podrían llevar a cabo suponen un cambio que puede influir en la evolución de la inflación, como menciona Shannon. “Digeriremos la velocidad y el grado de aplicación de las reformas del mercado laboral y las políticas de construcción de viviendas en los próximos años. Si los problemas de productividad y crecimiento salarial en el Reino Unido se agravan en lugar de aliviarse, se producirán implicaciones preocupantes para la inflación británica, pero por ahora los vigilantes de los bonos observan imperturbables”.
Sin embargo, por el lado de las oportunidades de inversión, el escenario es mucho más complaciente, ya que “hay empresas británicas con exactamente las mismas perspectivas de rentabilidad y crecimiento que sus homólogas estadounidenses, pero las británicas tienen un precio más barato”, comenta Azad Zangana, economista y estratega senior europeo, Schroders.
De hecho, Londres ha recuperado su corona de París como mayor mercado de renta variable de Europa, otra señal quizá de la mejora de las perspectivas para la renta variable británica. En este sentido, la defensa ha sido uno de los sectores más pujantes del Reino Unido, que pisa fuerte en este ámbito. El acuerdo AUKUS entre Estados Unidos, Australia y el Reino Unido demuestra el poder de la defensa y la tecnología británicas.
Por todo ello, “el Reino Unido cuenta con una muy buena selección de empresas británicas de defensa de mediana capitalización que están consiguiendo contratos bastante importantes. Aunque su historia ha sido un poco irregular en términos de ampliación, el Reino Unido tiene una historia STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) muy sólida; no hay que olvidar que fue la cuna de internet”, comenta Philip Chandler, gestor de fondos y responsable de multiactivos en Reino Unido, Schroders.
2024-07-05 09:54:20