El punto fuerte de Uber radica en ofrecer un servicio diferente al del taxi profesional, sin embargo, de salir adelante, esta medida podría acercar peligrosamente a la startup al tipo de ‘solución’ que ofrece este gremio.
Las pruebas se están realizando en Nueva York, Nueva Jersey, Phoenix y Dallas, y de los resultados que se obtengan dependerá que la compañía decida extender el cobro por espera a otros países.
Según explica TechCrunch, hacer pagar a los usuarios por llegar un par de minutos tarde eliminaría de golpe parte de la ventaja que, para el cliente, tiene Uber: es más barato que los taxis con licencia.
¿Por qúe esta medida? La compañía pierde 1.000 millones de dólares cada semestre, por lo que esta nueva norma podría ser una manera de recortar costes, recaudar ingresos y ‘calmar’ a sus conductores que al fin y al cabo son quienes se enfrentan cada día a las quejas, protestas y manifestaciones de los taxistas tradicionales.
¿Muestra de debilidad?
Pese a la firmeza que ha demostrado Uber ante todas las acusaciones que ha recibido, para muchos el acuerdo al que ha llegado en California y Massachusetts, es una muestra de debilidad. La startup acordó pagar hasta 100 millones de dólares para llegar a un acuerdo en una demanda colectiva que resuelve un gran desafío a su modelo de negocio, permitiendo a la plataforma de transporte mantener a sus conductores como contratistas independientes en estos lugares.
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