En pleno verano y una vez terminado el Mundial de Brasil, los fichajes de los grandes clubes constituyen, con permiso de los diversos torneos amistosos, el principal aliciente del panorama futbolístico. Si a esto se le suma lo boyante de las cuentas de Madrid y Barça, y la gran renovación de la plantilla del vigente campeón de la competición liguera, el Atlético de Madrid, el trasiego de futbolistas de los que cuestan millones se hace especialmente intenso.
En este sentido, ya fue millonario uno de los primeros traspasos del verano, el de Ander Herrera del Athletic de Bilbao al Manchester United, y eso que ninguno de los dos equipos terminó entre los primeros clasificados de sus respectivas competiciones. Aun así, el club red, que a la postre firmaría el mayor patrocinio del fútbol europeo, se hizo con el mediocentro español por 36 millones de euros.
A él le han seguido otros muchos jugadores que, con un precio superior a diez millones de euros, han recalado en algún equipo de la primera división española, aunque varios de ellos con precedencia de la misma competición. Es el caso de Griezmann, el joven delantero francés que por 30 millones de euros ha cambiado las franjas azules de la Real por las rojas del Atlético, o el de Rakitic, el siguiente en discordia con un traspaso de 22 millones de euros del Sevilla al FC Barcelona.
En este sentido, el Barça es con diferencia el club que más dinero ha invertido en adquirir jugadores de equipos españoles, cerca de 55 millones que resultan de sumar los 22 del ya citado Rakitic, los 20 que pagó por el defensa del valencia Mathieu y los 12 del portero de la Real Sociedad Claudio Bravo. Claro que no sólo en la liga BBVA ha buscado refuerzos. Esa misma posición la ha cubierto también con el portero procedente del Borussia Mönchengladbach, Ter Stegen, por 12 millones de euros, tras la salida de Víctor Valdés a un equipo que finalmente, y a pesar del preacuerdo existente, no será el Mónaco.
El mismo movimiento se adivina en la portería de su máximo rival, el Real Madrid, aunque en su caso aún está por ver. La posible llegada del costarricense Keylor Navas dejaría fuera del club a uno, si no a los dos, de los porteros titulares de la temporada pasada, Iker Casillas y Diego López. También en el arco del Atlético de Madrid, del que se ha despedido el Zamora Courtois, se producirá un relevo que aún está por concretar. Sí se han materializado, en cambio, la contratación del lateral del Benfica Siqueira por 10 millones de euros, así como la del delantero del Bayer de Múnich Mandzukic por 22.
Y es que la caja del Atlético está llena tras el traspaso al Chelsea de algunos de sus mejores jugadores de la temporada pasada, como son Diego Costa y Filipe Luis, por 38 y 20 millones de euros, respectivamente. También Barça y Madrid han obtenido liquidez con las ventas de Cesc Fábregas (33 millones) y Alexis Sánchez (35) a Chelsea y Arsenal, y de Morata (22 millones) y Di María (80) a Juventus y PSG, necesaria para sus dos grandes fichajes: Luis Suárez y James Rodríguez.
Estos dos son sin duda los grandes fichajes del verano en Europa, y aunque el Barça ha pagado por el mejor jugador de la pasada Premier apenas 5 millones de euros más que el Madrid por un jugador prácticamente desconocido hasta la disputa del Mundial, lo cierto es que a día de hoy la del equipo merengue parece una operación difícilmente mejorable. Y es que según las principales consultoras, James Rodríguez ha sido con diferencia el futbolista que más se ha revalorizado en el torneo disputado en Brasil, al contrario que Luis Suárez, sancionado cuatro meses por su mordisco al italiano Chiellini.
Con todo, los 75 millones de euros que le ha costado al Real Madrid fichar al futbolista revelación del Mundial, cuando antes del verano Transfermarkt le concedía una valoración de apenas 35 millones de euros, podrían parecer desorbitados, pero de poco valen estas cábalas si se tienen en cuenta las más de 300.000 camisetas del jugador colombiano que se vendieron en apenas una semana, tanto en España como en su país de origen y en Asia a través de internet, gracias a lo cual el club ha obtenido unos ingresos de más de 35 millones de euros.
Claro que los beneficios del traspaso podrían no terminar ahí, con un retorno directo de la inversión de casi el 50%, sino que entre sus ventajas estaría también la consecución de una importante influencia en el mercado colombiano, huérfano de estrellas en la liga BBVA desde la marcha de Falcao al Mónaco, y que cuenta, como se pudo comprobar durante la presentación del jugador en el Santiago Bernabéu, con un importante número de seguidores en la región. En este sentido, el traspaso del jugador se ha fraguado sin grandes enfrentamientos entre Mónaco y el Real Madrid precisa y presuntamente porque al club monegasco, que ya cuenta entre sus filas con la otra gran estrella del fútbol colombiano, la permanencia de James no le resultaba tan beneficiosa.
hemeroteca
