2018 está siendo un año trascendental para la igualdad de género, pero aún queda mucho por hacer. Las organizaciones deben dejar de considerar la diversidad como algo “agradable” sobre lo que conversar para empezar a tomarlo como lo que es, un factor clave de competitividad que proporciona beneficios comerciales tangibles. Un estudio de McKinsey señala […]
Dirigentes Digital
| 21 jun 2018
2018 está siendo un año trascendental para la igualdad de género, pero aún queda mucho por hacer. Las organizaciones deben dejar de considerar la diversidad como algo “agradable” sobre lo que conversar para empezar a tomarlo como lo que es, un factor clave de competitividad que proporciona beneficios comerciales tangibles. Un estudio de McKinsey señala que las empresas con mayor diversidad de género tienen un 21% más de probabilidades de obtener retornos financieros superiores a la media de su sector. No parece complicado entender por qué esto es así. Está demostrado que la variedad de ideas y experiencias impulsa la innovación, algo positivo para la empresa, los empleados, los clientes y los partners.
Impulsando la diversidad en el sector TIC
La brecha de género en la industria tecnológica es consecuencia de una serie de factores culturales, estereotipos y modelos de hacer negocio que comienza en las aulas y se extiende hasta los consejos de dirección, algo que desalienta a las mujeres a la hora de orientar su formación hacia carreras relacionadas con la tecnología.
Para cambiar esta realidad, los líderes empresariales deben asumir la responsabilidad de atraer talentos diversos y crear culturas más inclusivas. Nuestra naturaleza nos empuja a imitar a las personas a las que admiramos o seguimos, por lo que un líder que dé el ejemplo adecuado también establecerá la forma de actuar del resto de la compañía y, en este caso, alentará a los empleados a apoyar la inclusión de todos sus compañeros, independientemente de su género, etnia u orientación sexual.
El año pasado, nuestro CEO y fundador, Michael Dell, firmó la iniciativa Catalyst CEO Champions for Change junto con otros 50 directivos de compañías líderes. Todos ellos adquirieron en ese momento un compromiso tanto personal como profesional para acelerar la igualdad de género y la inclusión en sus empresas. Manifestaciones de este tipo resultan claves a la hora de impulsar la diversidad en el entorno de los negocios.
Derribando barreras y eliminando el sesgo
Abordar el tema del equilibrio de género y desarrollar una estrategia seria de diversidad e inclusión puede resultar una tarea compleja para algunas empresas. No importa, no hay que entregarse al desaliento. Lo importante es dar el primer paso, iniciando un diálogo interno y desafiando los prejuicios que en muchas ocasiones se mantienen de forma inconsciente y las formas de trabajo que pueden estar frenando el progreso de ciertos grupos. Es algo tan sencillo como observar los comportamientos de los hombres con respecto a las mujeres en las reuniones de trabajo.
Implantando pequeñas normas, como no interrumpir a las mujeres cuando tomen la palabra en estas reuniones (algo que ocurre mucho más de lo que pensamos), o adoptando medidas más ambiciosas, como la puesta en marcha de programas dirigidos a fomentar el liderazgo de la mujer, podremos ir avanzando en la normalización de una realidad desequilibrada en lo que al género se refiere, así como fomentar el sentimiento de inclusión de las mujeres dentro de la organización.
En Dell hemos puesto en marcha distintas iniciativas en este sentido. Tenemos, por ejemplo, varios grupos conocidos como “Employment Resource Groups”, que son comunidades que ofrecen orientación y fomentan el desarrollo del liderazgo a personas que integren diversas realidades de género, etnia, orientación sexual, entorno socioeconómico, etc. En la actualidad existen más de 300 grupos de este tipo repartidos por 60 países de todo el mundo. Tan influyentes están siendo estos grupos para la configuración de nuestra cultura corporativa, que el objetivo de la compañía, declarado en el informe Legacy of Good, es que el 40 por ciento de los empleados de Dell participe en un ERG en 2020.
Dell también ha sido la primera empresa del sector TI en participar en Catalyst Many Advocating Real Change (MARC), un programa que involucra a los directivos en la puesta en marcha de un diálogo sincero sobre la situación del género y la diversidad en sus lugares de trabajo. Actualmente, más de 2.500 responsables de equipos en 23 países de EMEA están participando en este programa y nos hemos comprometido a que a principios de 2019 participen el 100% de los ejecutivos de la compañía.
En Dell reconocemos que aún tenemos mucho trabajo por hacer para mejorar la diversidad y la inclusión, pero a través de los programas que hemos puesto en marcha y de los compromisos que hemos adquirido en este sentido, nos estamos esforzando en alcanzar una cultura en la que seamos capaces de acoger a cada individuo tal como es y en la que ayudemos a todos a tener éxito. Reconocemos que la diversidad y la inclusión son un imperativo y sabemos que es importante para todos: empleados, clientes y partners.
Está claro de que en la sociedad y en los negocios aún hay un largo camino por recorrer hasta alcanzar la paridad de género. La buena noticia es que se está progresando. Al menos, ahora somos conscientes de que si queremos obtener los mejores resultados es necesario contar con una fuerza laboral unida, diversa e inclusiva. En Dell vamos a seguir trabajando en ello.
Isabel Reis es Directora General Dell EMC Enterprise Business España y Portugal