La salida de Reino Unido de la Unión Europea tendrá un coste importante para todos los países que tienen buenas relaciones con esa economía. El peso de Polonia en Reino Unido y viceversa puede verse afectado en el momento en el que se confirme el Brexit y se cierre un acuerdo. Pero hasta entonces, Polonia continuará siendo uno de los países que más crezcan en Europa.
Si el crecimiento de Europa está estimado en el 2,2% en 2018, y el de la zona euro en el 2%, Polonia superará esas tasas de avance con un incremento de más del 4%, según un informe de Crédito y Caución. Hay que señalar que España, uno de los principales motores de la zona euro, crecerá en torno al 2,7% (2,6% según el Gobierno), mientras que la economía alemana se elevará un 1,9% y la francesa un 1,6% (FMI).
Por tamaño de su PIB, Polonia se encuentra dentro de las diez primeras economías de la Unión Europea, por delante de Bélgica, Austria y Noruega y por detrás de España, Países Bajos y Suecia. A pesar de que la demanda de los consumidores y las inversiones seguirán sosteniendo el crecimiento de Polonia, este se verá más perjudicado a la larga por el Brexit.
Reino Unido es el segundo principal destino de las exportaciones de Polonia, por detrás de Alemania y además la mayor parte de los 4.000 millones de euros de remesas de los polacos procede de Reino Unido. Desde Crédito y Caución señalan que esta situación puede afectar a los fondos estructurales de la Unión a largo plazo.
Esas causas provocarán que el crecimiento de Polonia se ralentice. En cualquier caso, mientras que la Unión Europea crecerá un 2% en 2019, y la zona euro, un 1,9%, Polonia seguirá manteniendo una expansión económica sólida, por encima del 3%. Se beneficia de un nivel de deuda pública moderado, que se encuentra en el 50%. El déficit fiscal se viene reduciendo desde 2017 con la entrada de nuevos ingresos fiscales, aunque a la vez se ha producido un aumento de los gastos, en especial por lo que se refiere a la inversión pública y al gasto social.
Por otra parte, el desempleo es mínimo, del 3,4% según los últimos datos de agosto. Ese nivel de desempleo refleja el problema de la falta de mano de obra que, no obstante y según las previsiones, no afectará al crecimiento del país.
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