Solo cuatro jornadas ha durado el interés público de Abanca por Liberbank, entidad fruto de la fusión entre Cajastur, Caja de Extremadura, Caja Castilla-La Mancha y Caja Cantabria. Este martes la compañía presidida por Juan Carlos Escotet ha anunciado que renuncia a su intención de explorar una operación corporativa con Liberbank, que siempre ha mantenido que prosigue sus conversaciones de fusión con Unicaja.
Se echa para atrás con el argumento de que el plazo de diez días hábiles otorgado por la CNMV para retratarse y concretar su decisión –no solo su interés- es insuficiente para realizar una ‘due diligence’ y observar en detalle determinados aspectos relativos a Liberbank y su grupo. Y justo ese argumento es lo llamativo. “Es curioso que se sugiera un precio concreto (0,56 euros) con una prima y ahora comenten que necesiten ver los libros para presentar esa OPA. No me queda muy claro cómo han llegado a ese precio. Lo lógico es hacer las cosas al revés. Es extraño”, comenta Susana Felpeto, analista de renta variable de atl Capital.
En este punto, lo que explica Abanca es que el precio estaba basado en la información pública disponible. Por eso supeditaba la oferta final a que pudiese realizar un análisis en profundidad de Liberbank. Pero el caso es que la entidad presidida por el venezolano Juan Carlos Escotet, que llevaba meses en negociaciones con accionistas de Liberbank, desiste del lanzamiento de una OPA. Desde la hasta ahora interesada niegan haber actuado contra la norma pero lo cierto es que muchos minoristas, ante lo rocambolesto de una situación que ha durado apenas unos días, siguen con la boca abierta.
2019-02-26 12:09:25