La huelga podría afectar de forma significativa el día a día de los ciudadanos ya que los servicios de telemarketing están presentes tanto en el sector público como en el privado. De momento, en la franja horario nocturna, donde apenas trabaja el 3% del sector, los datos de participación, no son significativos. Habrá que esperar al paro del turno de mañana (de 11.30 a 12:30) y al turno de tarde (de 17.30 a 18:30 horas) para saber el seguimiento.
El sector está marcado por la precariedad, con sueldos medios de 750 euros para jornadas laborales de 6 horas de media. "Las empresas recurren a las jornadas parciales porque la gente no aguanta 8 horas, prefieren que trabajen 5 o 6 horas, lo den todo y que luego trabaje otro. Es una cuestión de productividad", explica Santiago Alonso, secretario general de telemarketing de CGT. El convenio, vigente por ultraactividad desde el 1 de enero de 2014, mantiene los salarios congelados desde entonces.
La patronal ofrece en 2016 una subida salarial del 0,3% y a partir de 2018 vincular los incrementos salariales a la productividad de las empresas.
¿Qué reclaman los teleoperadores?
-Conservar la antigüedad laboral en los casos de subrogación de trabajadores. "Ahora mismo, si llevas 5 años trabajando para una empresa y hay una subrogación de trabajadores a otra, pierdes tu antigüedad", explica Alonso.
-La mayoría de los contratos del sector son por obra y el convenio actual permite los despidos sin que se termine el proyecto. "Queremos que eso cambie", añade.
-Un porcentaje de la plantilla a jornada completa. "Si no suben los salarios, al menos que se establezca un porcentaje mínimo de trabajadores a jornada completa que puedan tener sueldos dignos. Con 750 euros no puedes vivir", explica Santiago que es uno de los "privilegiados" que trabaja a jornada completa (39 horas semanales) y cobra 890 euros.
Pero a día de hoy las negociaciones están bloqueadas y, si nos atenemos a los conflictos judiciales del sector, el tema podría alargarse todavía más en el tiempo. "Para conseguir los 10 minutos de descanso en la última hora de la jornada laboral tuvimos que llegar al Supremo", recuerda Santiago.
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