La inversión en criptodivisas sigue generando recelos por parte de los reguladores de los mercados. Si hace unos días el presidente de la CNMV, Sebastián Albella, reclamaba poder regular las criptodivisas como el resto de valores, hoy sabemos que Reino Unido se plantea prohibir la venta de derivados de criptomonedas a los clientes no profesionales.
La FCA británica considera que los inversores particulares no pueden valorar de forma adecuada los riesgos de este tipo de productos por la naturaleza de sus activos subyacentes. En este sentido, destaca la extrema volatilidad de las criptodivisas y su eventual uso en el mercado secundario para delitos financieros. Características que, según considera el director ejecutivo de Estrategia y Competencia del regulador de Reino Unido, Christopher Woolard, pueden acarrear a ese minorista pérdidas inesperadas.
«La mayoría de los consumidores no puede valorar de forma adecuada derivados basados en criptoactivos no regulados. Los precios son extremadamente volátiles”, ha subrayado.
La FCA ha hecho cálculos incluso del potencial beneficio para los minoristas de un veto al acceso de derivados sobre criptodivisas: de entre lso 75 y los 234 millones de libras al año.
2019-07-03 10:56:29