Los ingresos de la aerolínea irlandesa crecieron un 16% hasta los 5.654 millones de euros, en línea con el aumento del número de pasajeros. Además, la compañía redujo costes, con una caída del 6% de los costes por unidad.
Ryanair ha explicado que sus operaciones durante el cuarto trimestre de su año fiscal, que coincidieron con la Semana Santa, se vieron afectadas negativamente por las "repetidas" huelgas de los controladores aéreos, "principalmente franceses", así como por los atentados terroristas perpetrados en Bruselas, lo que provocó la cancelación de más de 500 vuelos.
La compañía ha advertido que las cuentas del primer trimestre se verán afectadas por la suspensión de rutas provocadas por las huelgas de controladores y la depreciación de la libra esterlina ante la incertidumbre por el resultado del referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE) que se celebrará en ese país el 23 de junio.
En este sentido, la compañía ha hecho campaña en las últimas semanas en contra de la ruptura de Londres con Bruselas, el llamado "Brexit".
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