22 años hace de la primera concesión de Sacyr en Chile. Desde 1996, trece proyectos distintos han elevado la inversión total a los 6.000 millones de euros en el país, lo que ha convertido a la empresa en el principal inversor privado en infraestructuras en el país. Fruta de poner el foco en Chile, Sacyr ha conseguido una nueva construcción: un hospital en la región de Tarapacá. De hecho, estas inversiones se relacionan directamente con el ímpetu del gobierno del país por invertir en diferentes infraestructuras. Se trata del hospital de Alto Hospicio, el tercero que construye en el país, y que tendrá un coste de 136,8 millones de euros. Se suma al Hospital de Antofagasta, que gestiona en un 70%, y al de Quillota-Petorca, que se encuentra actualmente en construcción. El nuevo hospital contará 235 camas, 3 salas de parto integral, 49 boxes de atención, diseño con aislamiento antisísmico, eficiencia energética y un helipuerto. Está ideado para dar servicio a más de 108.000 habitantes y acogerá las atenciones de salud de las comunas del Tamarugal. De todas, formas habrán de pasar tres años y medio, o al menos ese es el plazo previsto, para que el nuevo hospital entre en funcionamiento. Esta última concesión da pistas sobre las nuevas orientaciones en los negocios de Sacyr, en los que cobran una gran importancia el sector sanitario. En lo que va de año, esta acción entronca con la construcción del aeropuerto El Tepual, de forma que alcanzan las dos concesiones en lo que va de año en Chile. De esa manera, Sacyr está involucrada en seis carreteras, con un total de 685 kilómetros, tres hospitales, con 671 camas actualmente más las 235 del nuevo hospital del Alto Hospicio; y en un aeropuerto en Chile, El Tepual- Puerto Montt.
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