Para Miguel Valero la puesta en marcha de su negocio ahora parece “increíble”. Socks Market nació hace cinco años cuando, tanto él como su socio, venían de la construcción y el periodismo, dos sectores castigados por la anterior crisis económica. Ante la situación de paro de larga duración a la que se enfrentaban, creyeron que serían capaces de sacar un par de sueldos montando la primera tienda multimarca de calcetines de España. Tres años después ya eran más de 20 personas en el equipo.
¿Qué objetivo se marcaron cuando pusieron en marcha Cero Cero?
Desde que abrimos nuestra primera tienda siempre tuvimos claro que queríamos apostar por los productos de proximidad. De las más de 50 marcas con las que trabajamos, siempre hemos dedicado un 70% de nuestros lineales a marcas españolas. Por eso, cuando empezamos a plantearnos crear una marca propia, decidimos que era el momento de llevar a su máxima expresión todo lo que siempre hemos defendido: la industria local y los productos de proximidad para contribuir a un comercio más justo en un mundo más sostenible.
Su propuesta busca ir más allá a través de un concepto que han bautizado como moda ʻkilómetro 0,0ʼ. ¿En qué consiste?
En los últimos años, en la industria de la moda se ha consolidado el concepto de moda ʻkilómetro 0 ʼ para definir aquellas prendas de fabricación local. Nosotros queríamos dar un paso más y añadir a la fabricación local el origen, también local, de las materias primas. No nos bastaba con el concepto ‘moda hecha aquí’, sino que queríamos desarrollar ‘moda hecha aquí con algodón de aquí’.
La materia prima con la que trabajan es el algodón. ¿En qué medida España está desaprovechando su potencial?
España cultiva el 21% del algodón europeo y, sin embargo, hasta Cero Cero ninguna marca española fabricaba sus prendas con ese algodón. Décadas de globalización nos han llevado a esta rocambolesca situación en la que sistemáticamente el algodón cosechado es exportado en bruto a países asiáticos desde donde luego las fábricas españolas lo tienen que volver a importar ya procesado. España fue tradicionalmente un país líder en industria textil e hilaturas y debemos ser capaces de recuperar ese liderazgo, aprovechando la cada vez mayor exigencia de los clientes por productos de proximidad y sostenibles.
¿Cómo consigue su estrategia reducir la huella de carbono?
Se calcula que una prenda recorre 25.000 kilómetros desde la cosecha del algodón hasta su puesta a la venta en una tienda. Nosotros hemos reducido ese recorrido a unos cientos de kilómetros. El algodón de nuestros calcetines se cosecha en Andalucía, se hila en Cataluña, se tiñe en Valencia y la prenda se confecciona en Burgos. Concentrar localmente todo el proceso reduce en un 95% la huella de carbono generada por el transporte de mercancías, refuerza la economía local, genera puestos de trabajo dignos en el entorno y aumenta la calidad de las prendas.
¿Y pueden afirmar que la calidad de sus prendas es mejor?
Sin duda. El algodón cosechado aquí es cada vez de mejor calidad y se cultiva cumpliendo las exigentes normativas europeas. También, la proximidad con los proveedores nos permite un mayor control de todo el proceso y, por último, las empresas nacionales con las que trabajamos son precisamente negocios que han sobrevivido a la globalización, gracias a la altísima calidad de sus productos frente a la guerra de precios a la baja de sus competidores en los mercados internacionales.
2022-09-21 06:48:36
