La subida del alquiler estrangula al pequeño empresario

La subida de los precios del alquiler es una de las principales problemáticas que asumen pymes y autónomos españoles en la actualidad. Un incremento que afecta a un sector muy castigado también por la subida de los intereses de las hipotecas, según los últimos datos aportados por la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE).

Una situación que, como ya declaraba a principios de año María José Landaburu, secretaria general de la organización, “empieza a ser insostenible, porque muchos de ellos tienen que hacer frente a unos precios desorbitados que les impiden desarrollar su actividad económica con normalidad y, en ocasiones, viéndose abocados al cierre”.

Incremento de zonas tensionadas

Aquellos barrios en donde existen una alta desproporción entre el precio del alquiler y el poder adquisitivo de sus residentes se han disparado en el último año. Datos que para la patronal de autónomos resultan reveladores ya que indican los “sobrecostes y aumento sustancial en sus gastos de alquiler”. Una subida que ha supuesto una carga adicional para los pequeños empresarios y que se ha desmarcado del resto, al alza, en el caso de las zonas tensionadas.

Según el informe presentado, el 14,5% de autónomos ha pasado a asumir una subida en el alquiler de sus locales de trabajo de 400 euros, de 450 euros para el 16,4% de estos trabajadores y 500 euros para el 18,2%. Una carga adicional que desde UATAE se solicita hacer frente para aliviar gastos a través de “mayores controles y promoviendo precios justos”.

Proteger al autónomo legalmente

Desde negociar una bajada del alquiler, ajustar los horarios de su actividad para sacarle un mayor rendimiento o buscar otro local, de diferentes características, para beneficiarse de un mejor precio. Son algunas de las opciones más recurrentes de los autónomos para sortear este escenario alcista y continuar con sus negocios. Sin embargo, no abarca el problema.

El problema, para Miguel Vila, portavoz de UATAE, radica en que “los alquileres se han revisado con el IPC del 10% y sin una protección por parte del Gobierno”. El dirigente plantea medidas que limiten las subidas desproporcionadas de las rentas, especialmente en periodos de excesiva inflación como el actual, a través incluso de “límites máximos” en los incrementos de alquiler.

En julio los afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) descendió hasta los 3.344.562 autónomos, 6.819 trabajadores por cuenta propia menos que en el mes anterior, lo que denota la delicada situación del sector. “Los gastos que cada vez se aumentan más están lastrando su actividad”, declaraba Lorenzo Amor, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), añadiendo que “es fundamental tener estabilidad y certidumbre y tener un Gobierno estable”. 

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