Francesc Quintana: “Una visión clara de futuro es imprescindible para separar los ‘gadgets’ e invertir en tecnologías que realmente aportan valor a la empresa”

¿Qué tendencias tecnológicas están destacando en el sector inmobiliario? 

En la actualidad podemos destacar dos tipos de tendencias:

Por un lado, las que tienen su enfoque en la mejora de la experiencia de los clientes. Aquí encontraríamos en primera instancia las visitas virtuales en alta resolución, que permiten incluso tomar medidas de las estancias desde cualquier dispositivo móvil o ordenador. Esta misma tecnología ahora está evolucionando para poder hacer decoraciones virtuales, e incluso reformas completas con una aproximación del coste de la misma. 

Y, por otro, las que buscan una mejora en la eficiencia en los procesos internos de las oficinas. Aquí, la IA aplicada al proceso de datos nos ayuda a tomar mejores decisiones, cómo que campañas son mejores, analizar las conversiones, y todo el buyer journey digital. 

 ¿Cómo está cambiando la tecnología la forma en que inmobiliarias y clientes se comunican?

El cliente cada vez tiene y precisa de más información, ya no vale ir a un inmueble y sacar 4 fotos con un teléfono y colgarlas en internet, ahora quieren información veraz y de calidad, ya no para la fase previa de búsqueda, sino para la posterior de la toma de decisiones. Tecnologías como el Blockchain nos ayudarán a crear un entorno seguro para transmitir esta información cumpliendo los más altos estándares de privacidad para ambas partes. 

¿Están ganando las proptech terreno a la inmobiliaria tradicional o aún es pronto para afirmarlo?

Si entendemos a las “proptech” como las inmobiliarias “hard discount”, estas tuvieron un boom hace un par de años y nos ayudaron a muchas inmobiliarias tradicionales a adoptar nuevas tecnologías y a subir los estándares de los clientes. Yo hago una lectura muy positiva, pero en un mercado tan atomizado, aunque tengan un volumen considerable, no han conseguido desbancar ni posicionarse como una alternativa firme. 
 

Para una inmobiliaria tradicional, ¿es rentable adoptar nuevas tecnologías para adaptarse a los nuevos tiempos?

En este mundo tan digitalizado, es adaptarse o morir, pero las tecnologías no penetran tan rápido como parece, y aparecen cosas nuevas cada día. Una visión clara de futuro es imprescindible para separar los “gadgets” e invertir en tecnologías que realmente aportan valor a la empresa y/o los clientes. 

¿Qué características tiene España para haberse convertido en uno de los países con mayor inversión en proptech?

España es uno de los países del mundo dónde el sector inmobiliario en general tiene un peso específico más amplio en el PIB. El hecho que tengamos una buenísima relación entre calidad de vida y coste de la misma es un imán inmejorable para el talento. Si añadimos el factor de que la enorme cantidad de dinero en búsqueda del “pelotazo” hizo que muchas empresas se decidieran por nuestro país. Veremos si a partir de este año, con el mercado de capitales más exigente somos capaces de mantener ese nivel de emprendeduría, yo me atrevería a decir que tristemente no será así. 

¿Cuáles son los desafíos a los que se enfrenta el mercado inmobiliario, tanto en el ámbito tecnológico como en el de negocio?

Desde el punto de vista de negocio, en un año complejo a nivel de disminución de operaciones, es conseguir rentabilidad en un entorno que la competitividad incita a bajar honorarios. 

Mientras que, desde el punto de vista tecnológico, todavía nos falta un buen enlace entre emprendedores y empresas. Llevar esos PMV (producto mínimo viable) a productos que realmente interesen a las empresas y que ambas conjuntamente lo desarrollen en beneficio de ambas. Por suerte, hay muy buenas iniciativas que estoy convencido que ayudarán a ello.